Marcel Pena
Aktualitateko erredaktorea / Redactor de actualidad

Casi la mitad de las mujeres de la CAV ha sufrido violencia machista a lo largo de su vida

Un 48,2% de las mujeres residentes en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa de entre 16 y 85 años ha sufrido algún tipo de violencia machista alguna vez en su vida, según una encuesta del Gobierno de Lakua. La consejera Nerea Melgosa ha calificado como «preocupante» que el 86% no haya denunciado.

Presentación del estudio, este viernes en la sede de Lakua en Bilbo.
Presentación del estudio, este viernes en la sede de Lakua en Bilbo. (Mikel MARTINEZ DE TRESPUENTES | FOKU)

Una de cada dos mujeres residentes en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa ha sufrido violencia machista dentro o fuera de la pareja a lo largo de su vida. Esta es la principal conclusión, que no la única, que arroja un estudio pionero, el primero que se desarrolla en la CAV, impulsado por el Departamento de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico del Gobierno de Lakua.

La encuesta de violencia contra las mujeres y otras formas de violencia interpersonal llevada a cabo se ha presentado este viernes en la sede del Ejecutivo autonómico en Bilbo, en un acto que ha contado con la participación de la consejera Nerea Melgosa y la directora de Emakunde, Miren Elgarresta.

Para elaborar este estudio, han señalado, un grupo de 22 investigadoras entrevistó entre febrero y mayo de 2024 a 4.500 mujeres de entre 16 y 85 años residentes en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. Elgarresta ha agradecido a todas ellas su «valentía y generosidad» por compartir unas experiencias «duras, dolorosas y muy graves que nos han permitido conocer sus vivencias personales y obtener una radiografía profunda y actualizada de la realidad, que nos muestra un contexto de vulneración de derechos más generalizado de lo que a priori se piensa». En este mismo sentido, Melgosa ha querido pedir perdón a las mujeres encuestadas «por si les hemos hecho daño con su vuelta al relato y, sobre todo, por si han sentido que les hemos fallado como sistema y administración».

En cuanto a los tipos de violencia, el estudio detalla que un 13,5% de las mujeres que han tenido pareja en alguna ocasión han sufrido violencia física (incluidas amenazas) en el ámbito de la pareja; el 8,3%, violencia sexual, y el 28,6%, violencia psicológica. En total, un 29,4% de las mujeres ha padecido algún tipo de violencia en sus relaciones de pareja. En el caso de la violencia machista fuera de la pareja, el 15,7% ha sufrido violencia física; el 26,1%, violencia sexual, y el 33,4%, violencia física y/o sexual. Los datos agrupados desvelan que el 48,2% de las mujeres residentes en la CAV ha sufrido algún tipo de violencia dentro o fuera de la pareja alguna vez en su vida y un 7,4% la ha vivido en el último año.

Sobre este aspecto, Elgarresta ha querido destacar «la prevalencia de la violencia en el itinerario vital de las mujeres». «Por ejemplo, de los casos de violencia dentro de la pareja, en un 83,2% de los casos se produce de manera reiterada. No es algo puntual, es algo que se sufre en muchos casos durante buena parte de la vida», ha detallado. Unas conductas que permanecen «ocultas» y que están «más normalizadas de lo que pensamos», según la directora de Emakunde. Un 46,4% de las víctimas ha declarado haber padecido violencia psicológica con frecuencia.

«Entre las encuestadas, hemos tenido casos de mujeres de cierta edad que han relatado casos de violencia y no querían que su familia, hijas e hijos, supiesen nada, pero que por el bien común han relatado su experiencia de violencia»

Además, ha señalado las consecuencias que esta violencia tiene en sus vidas, como el consumo de medicamentos, alcohol y drogas, así como consecuencias psicológicas y en la salud. Por otra parte, un 81,2% de las mujeres que han sufrido algún tipo de violencia, dentro o fuera de la pareja, se lo ha contado a sus familiares y amigos, un dato que Melgosa ha calificado como «positivo». Sin embargo, cree que es «preocupante» que el 86% no hayan denunciado, principalmente por la falta de identificación de la violencia con un delito denunciable (49,9%), la aparición de sentimientos de culpa, vergüenza o bloqueo emocional (15,5%) o la necesidad de proteger a los hijos o alguna otra persona de la familia (9,5%).

«Entre las encuestadas, hemos tenido casos de mujeres de cierta edad que han relatado casos de violencia y no querían que su familia, hijas e hijos, supiesen nada, pero que por el bien común han relatado su experiencia de violencia. En esta encuesta la colaboración de las mujeres ha sido muy importante, han colaborado muy activamente. Y, en algunos casos, los relatos han sido aterradores», ha relatado Elgarresta.

Por ello, el estudio ha analizado en un aparto las consecuencias de la violencia sufrida y la solicitud de ayuda: un 18,4% ha manifestado haber recibido asistencia médica o psicológica como consecuencia de los episodios de violencia, mientras que un 17,3% no la recibió pero considera que debería haberla recibido y un 63,8% dice no haberla necesitado.

En este aspecto, han recordado que «la violencia está presente en todos los ámbitos» y es transversal a la edad, nacionalidad, nivel de estudios o el nivel de ingresos. Del mismo modo, Melgosa ha aclarado que «no hay un perfil claro de agresor».

«Espiral de violencia machista»

Tras ofrecer los datos más destacados de la encuesta, ambas responsables políticas han hecho sus valoraciones sobre esta «plaga». En su turno de palabra, Elgarresta ha puesto en valor «el esfuerzo de estas mujeres, el intento por socializar lo que les pasa, por pedir ayuda». «Están haciendo algo que es muy difícil. La pelota no está en su tejado, sino en el nuestro, en el de toda la sociedad», ha comentado.

«Debemos responder, acompañar, comprender, ayudar, atender, sentir que este no es un problema personal de unas mujeres, sino un problema social. Y debemos estar a la altura de las circunstancias. Las instituciones, las amistades, las familias, todos los agentes, toda la sociedad. Las mujeres no pueden hacer frente solas a este problema estructural y de una dimensión como la que nos describe esta encuesta», ha lamentado la directora de Emakunde.

Por su parte, Melgosa ha querido destacar que, además de «un problema social y de salud pública de primer orden, la violencia contra las mujeres es estructural», y que muestra de ello es que «afecta a casi la mitad de las mujeres vascas». Para salir de esta «espiral de violencia machista», la consejera ha interpelado a «toda la población, pero especialmente a los hombres, para que sigan dando pasos al frente contra esta plaga».