
Las imágenes de los niños desnutridos al borde de la muerte ha reavivado las alarmas sobre la situación humanitaria provocada por Israel en la Franja de Gaza, donde «el peor escenario posible de hambruna está en curso», según advierte en su informe la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria (IPC), una autoridad en la materia respaldada por la ONU y organizaciones humanitarias que monitorea las crisis alimentarias. Afirma que la crisis en este territorio de 365 km2 donde viven cerca de dos millones de palestinos ha alcanzado «un punto alarmante y mortal», y alerta de que «el lanzamiento aéreo de víveres» autorizado por Israel «no será suficiente para revertir la catástrofe humanitaria».
En mayo, este organismo, que determina el nivel de inseguridad alimentaria según cinco niveles, clasificó a 1,95 millones de residentes de la Franja (el 93% del total) en «crisis» (nivel 3), incluyendo 925.000 en «emergencia» (nivel 4) y 244.000 en «desastre» (nivel 5). Según el informe, se está realizando un nuevo análisis cuantitativo de la situación.
«Los últimos datos indican que se han alcanzado los umbrales de la hambruna (…) en la mayor parte de la Franja de Gaza», según el informe, que señala que «una de cada tres personas pasa varios días sin comer nada». «Más de 20.000 niños han sido atendidos por desnutrición aguda entre abril y mediados de julio, de los cuales más de 3.000 sufren desnutrición severa», agrega el documento de IPC. Los hospitales han informado de un rápido aumento de muertes por hambre en menores de cinco años, con al menos 16 muertes reportadas desde el 17 de julio, añade.
Ahmed al-Qoran, un habitante de Gaza, afirmó ayer que las ayudas por aire no son suficientes: «Necesitamos más porque no morimos de hambre y no tenemos nada».
El informe de IPC, fruto del trabajo de organizaciones no gubernamentales, instituciones regionales y agencias de la ONU, hace un llamamiento a «una acción inmediata» para poner fin a las hostilidades y permitir un acceso humanitario sin restricciones, y dice que si no se actúa ahora, habrá «muertes masivas» en gran parte del enclave palestino
Se agota el tiempo
En similares términos se expresaron varias agencias de la ONU, que advirtieron de que «se está agotando el tiempo para montar una respuesta humanitaria a gran escala».
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) y Unicef alertaron sobre «el colapso de los servicios esenciales, y las graves limitaciones a la entrega y distribución de la asistencia humanitaria impuestas a la ONU», y añadieron que el consumo de alimentos se ha desplomado mientras que la desnutrición aguda «ha aumen- tado a un ritmo sin precedentes» y «los niveles de desnutrición entre menores de 5 años se han cuadruplicado en dos meses, alcanzando el 16,5%».
«Más de 500.000 personas (casi una cuarta parte de la población) padecen condiciones similares a la hambruna, mientras que el resto se enfrenta a niveles de hambruna de emergencia», destacaron.
El director de emergencias del PMA, Ross Smith, afirmó que la crisis en Gaza «no se parece a nada que hayamos visto en este siglo. Nos recuerda desastres anteriores en Etiopía o Biafra» en el siglo XX.
Todos los menores de cinco años -más de 320.000-, están en riesgo de desnutrición aguda y miles padecen desnutrición aguda severa, la forma más mortal de desnutrición.
Cindy McCain, directora del PMA, indicó que «el sufrimiento insoportable de la población es evidente para el mundo. Esperar la confirmación oficial de la hambruna para proporcionar la ayuda alimentaria vital que necesitan desesperadamente es inadmisible».
Lamentaron que pese a la reapertura parcial de los cruces fronterizos, «la ayuda que entra es apenas una pequeña parte de lo que necesita mensualmente una población de más de dos millones de personas&eot;&eot; y que «solo para cubrir las necesidades básicas de asistencia alimentaria y nutricional en Gaza, se requieren más de 62.000 toneladas de ayuda vital cada mes». Y reclamaron «un alto el fuego inmediato y sostenido» y que se garantice «un acceso humanitario seguro y sin trabas, para el flujo masivo de asistencia a través de todos los pasos disponibles».
Las agencias de la ONU instaron a «inundar de inmediato y sin obstáculos con ayuda alimentaria masiva» la Franja de Gaza, y «mantener ese flujo diario para evitar la hambruna generalizada». En ese sentido, siete expertos de la ONU, entre ellos la relatora especial para Palestina, Francesca Albanese, condenaron el bloqueo humanitario impuesto por Israel y pidieron un despliegue de asistencia por vía naval «desde todos los puertos del Mediterráneo», que incluya «combustible, agua, suministros y personal para ayudar a restaurar los servicios esenciales en Gaza y cubrir las necesidades humanitarias urgentes».
El máximo responsable de la Unrwa, Philippe Lazzarini, reiteró en X que la hambruna que ya sufre la Franja de Gaza ha sido «totalmente provocado por el hombre». «Se ha alcanzado el umbral de la hambruna, con hambruna y desnutrición generalizadas en todo el enclave devastado por la guerra, incluso entre los niños. Solo en las últimas semana&eot; más de 100 personas han muerto de hambre», denunció antes de incidir en que «la única manera de revertir esta catástrofe es inundar Gaza con una ayuda masiva».
«Borrar generaciones»
Trabajadores de las ONG Oxfam Ghada AlHaddad, Save the Children y Glia alertaron de una hambruna «rápida e intencionada&eot;&eot;que amenaza con «borrar generaciones&eot;&eot; y aseguraron que todos los niños que ahora mismo están malnutridos van a morir a no ser que haya una reversión «inminente» de la situación.&eot;Señalaron que la entrada de unos pocos camiones -«ni significativa ni constante»- no debe distraer al mundo de la catástrofe humanitaria prov&eot;-&eot;cada por el régimen sionista y solo busca acallar la indignación pública.
Glia afirmó que las cifras de muertos por desnutrición -1.179 en total y 22 solo en las últimas horas- son «muy conservadoras» y las reales podrían ser un 10% superiores. «Todos se mueren de hambre», señaló su director médico Tarek Loubani.
Israel dijo que el lunes más de 200 camiones de ayuda fueron distribuidos por la ONU y agencias humanitarias, y que otros 260 fueron autorizados a cruzar a Gaza para depositar ayuda en puntos de recolección, cuatro tanques de la ONU trajeron combustible y 20 palés de ayuda fueron lanzados por aviones jordanos y emiratíes&eot;&eot;Pero&eot;&eot;egún Al-Jazeera&eot; solo se ha permitido la entrada a 50 camiones en los últimos tres días y todos han sido saqueados, mientras la hambruna avanza.
La UE, incapaz frente a la impunidad de Israel
La Unión Europea no logró ayer la mayoría necesaria de quince Estados miembros para suspender parcialmente la cooperación científica con Israel en represalia por la situación que el régimen sionista ha provocado en Gaza. Diez socios encabezados por los Estados francés y español, Países Bajos y Suecia votaron a favor; Hungría, República Checa, Austria y Bulgaria lo hicieron en contra, y un grupo numeroso con Alemania al frente evitó apoyar la propuesta de Bruselas a la espera de que Israel eleve la entrega de ayuda en base el «acuerdo humanitario» pactado con la UE y cuyo contenido se desconoce.
Por otro lado, ayer Gran Bretaña se sumó al reciente anuncio del Estado francés al avanzar que en septiembre, coincidiendo con la Asamblea General de la ONU, reconocerá el Estado de Palestina si Israel antes no da pasos para acabar con la «catastrófica situación en Gaza», decretar un alto el fuego y asegurar que no se anexará Cisjordania.
Más de la mitad de los muertos son mujeres, niños y ancianos
Más de la mitad (el 54,4%) de las 60.034 personas a las que Israel ha matado en casi 22 meses de ofensiva contra la Franja de Gaza son mujeres, niños y ancianos, según el Ministerio de Sanidad gazatí. Del número de víctimas mortales, 18.592 (el 30,8%) son menores y 9.782 (el 16,3%), mujeres, mientras que los ancianos suman el 7,3%. «Estos grupos representan el 54,4 % del total de mártires, lo que refleja claramente la magnitud de los ataques directos e injustificados contra la población civil por parte de las fuerzas de ocupación», indicó el Ministerio.
El Ejército israelí, mientras, sigue atacando a quienes buscan ayuda en plena hambruna. Sanidad indicó que el lunes los soldados mataron a 122 personas e hirieron a 637 en ataques en diferentes lugares de Gaza, a 40 de ellas cuando iban a los puntos de recogida de ayuda establecidos. Desde el amanecer de ayer, las tropas sionistas mataron a al menos 62 palestinos más, a treinta de ellos cerca de dos puntos de distribución, a pesar de las «pausas humanitarias» en los combates anunciadas por el régimen sionista.
La cifra de personas abatidas por los israelíes cuando se disponían a recoger ayuda desde que, a finales de mayo, Israel instaurara un polémico sistema de reparto con la GHF, gestionada por mercenarios, en unos pocos puntos de reparto distribuidos sobre todo en el sur, supera los 1.500 y la de heridos, los ocho mil.

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