Tres películas y una serie en sólo tres años, todas de éxito prácticamente unánime. Pero la mejor guía de Alauda Ruiz de Azúa (n. 1978) es la calma. La de Barakaldo entró tarde en la industria y para cuando estrenó ‘Cinco lobitos’ su hijo tenía ya seis años. Atrás quedaban las licenciaturas de Comunicación Audiovisual y de Filología Inglesa que la llevaron al mundo de la publicidad. Asistente de dirección, script, y luego directora y productora para grandes marcas (Toyota, Coca-Cola, Samsung), durante dos décadas mantuvo despierta su afección creativa realizando cortometrajes, con los que ganó multitud de premios en festivales internacionales y entre los que destacan su trabajo final de carrera, ‘Clases particulares’ (2005) o ‘Dicen’ (2011), el corto español más laureado del año, ambos disponibles en el repositorio Cortos de Metraje. Todos ellos pueden leerse como ensayos de la jugosa geología emocional que después encontramos en sus largos.

No obstante, si la comparamos con el resto de guionistas y directoras del ONCE (Otro Nuevo Cine Español, como Pilar Palomero, Belén Funes o Carla Simón), es la relatividad para con sus temas lo que caracteriza a Alauda Ruiz de Azúa. La triple galardonada con el Goya ‘Cinco lobitos’ (2022) arranca en la impotencia en primerísima persona ante el llanto inconsolable de un bebé para desvelarse como estudio amplio sobre las dinámicas del cuidado familiar, también en los procesos de muerte. No es el cuento sobre una madre incapaz, y ya. La ganadora del prestigioso certamen Séries Mania, ‘Querer’ (2024), se eleva como escaparate social así como proceso de Pasión colectiva y, aun así, señala sin reparos a la injusticia ejercida a Miren. Esta, una denuncia empática pero clarividente. También es la distancia la que manda en ‘Eres tú’, concesión eficaz e interesante en el terreno de la comedia romántica para plataformas. Es una cineasta renunciando a su voz autoral.

‘Los domingos’, que ha acompañado a Alauda Ruiz de Azúa durante larguísimos años, nada tiene que ver con la primera persona de una niña educada en un colegio-cooperativa, y por tanto nos permite interrogar a su reparto desde la distancia justa. La madurez también implica interesarse por las vidas ajenas, y viceversa. Hoy, junto al guionista Edu Sola, Ruiz de Azúa prepara una serie sobre la intimidad en tiempos de OnlyFans.