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Polo acusa a los agentes de multarle «por enemistad» pese a triplicar la tasa de alcohol

El ex concejal de Seguridad Ciudadana de UPN en Iruñea, Ignacio Polo, ha acusado a los policías municipales de «intencionalidad», y de multarle «por enemistad» pese a reconocer haber bebido y haber triplicado la tasa de alcohol permitida.

Ignacio Polo, a su llegada a los juzgados. (Iñigo URIZ / ARGAZKI PRESS)

Ignacio Polo, ex concejal de Seguridad Ciudadana en Iruñea, ha sido juzgado por conducir bajo los efectos del alcohol. Durante su declaración ha reconocido haber bebido, pero ha culpabilizado a los agentes de la Policía Municipal por la «intencionalidad de desvirtuar la realidad y decir algo que no ocurrió».

El ex concejal de UPN dio positivo el pasado 20 de abril. Polo conducía un coche oficial del Ayuntamiento de Iruñea cuando golpeó una furgoneta estacionada. Un agente de la Policía Municipal vio la maniobra y tras observar que mostraba síntomas de embriaguez, le realizó la prueba de alcohol en la que dio 0,65mg/l. Después, fue trasladado a dependencias de la Policía Municipal, donde se le volvió a realizar la prueba otras dos veces. En la primera arrojó una tasa de 0,75mg/l, y en la tercera medición, 0,64mg/l.

Hoy ha debido comparecer frente al juez en los Juzgados de Iruñea. A preguntas de la fiscal, que solicita la retirada del carnet de conducir durante dos años por un delito de «conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas» y una multa de 15 euros diarios durante 9 meses, que asciende a 4.050 euros, ha relatado que el día de los hechos estuvo «tomando unos vinos».

En su declaración, Polo, que dimitió como concejal tras los hechos, ha asegurado que al realizar su maniobra vio agentes de la Policía Municipal «agazapados, en actitud sospechosa». Pese a triplicar la tasa de alcohol en la segunda de las pruebas, ha asegurado que «indudablemente» los agentes le multaron «por enemistad».

Asimismo, el Sindicato Profesional de Policías Municipales de España, un mes después de que los agentes multasen a Polo, denunciaron una «caza de brujas» en la Policía Municipal de Iruñea. Del mismo modo, también pusieron sobre la mesa «irregularidades» en al auto que imputaba al ex concejal de UPN.