Toca hacer mejores los tres puntos de Mestalla

La estadística revela que al Depor se le suelen dar bien sus visitas a San Mamés. No obstante, el registro demoledor más inmediato con respecto al conjunto gallego es que suma ya diez partidos de Liga y dos de Copa consecutivos sin conocer la victoria y eso sí que es un dato que dice mucho del momento del equipo de Víctor Sánchez, una de las revelaciones del Campeonato que se ha desinflado en este tramo de Liga hasta el punto de ser el peor en cuanto a números en este 2016.

El Athletic de Ernesto Valverde tampoco es que vaya sobrado este año, y solo la victoria ante el Valencia el domingo evitó que se situara ahora mismo entre los cinco equipos con peores registros en estos dos meses. Curiosamente, aun solo con 10 puntos sumados en 9 partidos –4 derrotas, 3 victorias y 2 empates–, los rojiblancos han sacado más rédito que en los mismos 9 encuentros de la primera vuelta. Un triunfo en tierras levantinas que le ha posibilitado, como enfatizó ayer su técnico, «no permitir que los de arriba –Celta y Sevilla– no abrieran hueco y tenerlos a la vista, porque entramos ya en la fase de la Liga en que va habiendo poco margen, la fase decisiva».

Sea como fuere, los bilbainos encaran gracias a ese balsámico triunfo en Mestalla un futuro a corto plazo con grandes expectativas, que les vienen dadas por la entidad de los rivales, que nada tienen que ver con los Barça, Madrid, Eibar, Villarreal, Real o Valencia. Y si quiere aprovechar el terreno propicio que se le avecina estas jornadas, deberá empezar por amarrar los tres puntos ante los coruñeses.

Enfrente, un rival que está notando el problema de una plantilla descompensada, donde hay jugadores que aportan mucho pero otros no tanto, y donde su técnico hace meritorios malabares con lo que tiene. Un plantel con mimbres destacados como Lucas Vázquez o Luis Alberto. Un conjunto que se ve, últimamente, sufre mucho con los centros laterales y envíos al área –punto fuerte del Athletic– y lastrado por carencias en su juego asociativo, aunque muy peligroso al contragolpe.

Ernesto Valverde, habitual en él, no se fía, «es un partido peligroso y tendremos que trabajarlo bien», matizó ayer, y entiende que atraviesa más una mala racha de resultados que de juego. «Sólo han perdido tres partidos fuera de casa, aunque es un equipo que empata mucho, 13 partidos. Los dos últimos contra ellos los teníamos encarrilados y se nos torcieron. Yo les veo jugando bien».

Elogios a Rico, Merino, Muniain...

Un ojo puesto en el contrario y otro en los suyos. Sorpresón por la nueva no convocatoria de Iturraspe, ‘señalado’ tras su ausencia en Mestalla y definitivamente ‘marcado’ ahora. Valverde lo tiene claro, «no es tanto demérito de Ander como mérito de los demás», lo edulcoró. Ante el Marsella, el de Matiena no aprovechó la titularidad en un duelo muy exigente. «Hay competición interna, igual que él otros pelean cada día por jugar. Cuando uno tiene su ocasión debe ir a por ello». Y le envió dos mensajes muy nítidos: «Solo hay que ver a Mikel (Rico) el otro día» e «Iturraspe tiene que apretar». Por si había dudas. Desde luego, situación muy incómoda para un jugador emblemático y necesario recuperar.

Con quien se mostró satisfecho es con la respuesta de los menos habituales como Rico o Elustondo el otro día, tiene también mucha confianza puesta en un Sabin Merino del que dijo «está bien relacionado con el gol, tiene llegada, estrategia defensiva y ofensiva» y cuyas buenas prestaciones en banda le descartan como relevo puntual de Aduriz –contemplada tras la salida de Sola–, y encantado de que Muniain «esté perdiendo el miedo a la competición, al regate, al uno contra uno, uno de los pocos que tenemos en eso».

Cinco años, hoy, desde que jugara sin vizcainos por primera vez en su historia

Hoy se cumplen cinco años de una fecha histórica dentro de la centenaria trayectoria del club rojiblanco. Sucedió un 2 de marzo de 2001, en el campo de La Romareda. Ante el Zaragoza, el entonces técnico Joaquín Caparrós alineó el siguiente once: Cinco navarros: Iraizoz, San José, Ekiza, Javi Martínez y Orbaiz; cuatro guipuzcoanos: Iraola, Balenziaga, Susaeta y Gabilondo; un riojano, Fernando Llorente; y un alavés Toquero. Durante el transcurso del encuentro ante el Zaragoza salieron al campo dos navarros más, Muniain e Iñigo Pérez, y un riojano, David López. Así es, en 113 años de historia del Athletic, era la primera vez que se alineaba de inicio un once sin ningún vizcaino en sus filas y un partido completo sin ellos. Curiosamente, enfrente, en el conjunto maño, jugó un bilbaino, Ander Herrera. Los Koikili, Iturraspe, Ustaritz, Aurtenetxe o Amorebieta (aun nacido en Venezuela se le considera vizcaino) eran parte de la escasa representación de Bizkaia en aquella plantilla, donde entre los 12 jugadores con más minutos ese curso no había ninguno.

Han pasado cinco años desde esa fecha, y a día de hoy encontramos a Beñat (5º), Etxeita (7º), Williams (10º) o Sabin Merino (12º) entre los que más han participado. Bóveda, Lekue, Rico, Iturraspe, Iago, Ibai son los otros vizcainos del vestuario, 10 en total, 6 navarros, 4 guipuzcoanos, un alavés y un francés. Otro dato: en el Bilbao Athletic actual, de una plantilla de 27 futbolistas, 19 de ellos son de Bizkaia.J.V.