«Sé que no estoy en mi mejor forma, pero llego con muchas ganas y energías a la Vuelta»
El alavés del Bahrain regresa a la Vuelta seis años después de su última participación en 2015, cuando ganó una etapa en Andorra y ayudó a Fabio Aru a llevarse la general al descolgar a Tom Dumoulin en la última etapa de montaña. Vuelve con la intención de acabar en el podio final de la prueba.
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Mikel Landa apunta en su entrevista a NAIZ que no llega a la Vuelta que comienza este sábado en su provincia talisman en su mejor forma por su caída en el Giro, pero espera ir a más con la confianza de su victoria en la Vuelta a Burgos la semana pasada.
¿Cómo llegas a la Vuelta tras la dura caída del Giro?
Ha sido un período complicado, sé que no estoy en mi mejor forma, que los planes no han sido los que preveía al principio de temporada, pero llego con muchas ganas y muchas energías y eso, a veces, cuenta tanto como estar en tu mejor forma. Mi idea es ir a más porque la lesión se alargó más de lo que pensaba y no he podido meter mucha intensidad hasta ahora. La Vuelta a Burgos me ha dado un buen punto de forma y creo que con el paso de los días iré a mejor.
¿Ganar la general en Burgos con solo dos días de competición previos en el puerto en el que diez años antes lograste la primera victoria como profesional da confianza?
Ese día salí muy motivado. Me apetecía volver a ganar en Neila diez años después. Además estaba la general en juego cuando no me la esperaba y el resultado me dio mucha confianza. Me ayuda a aguantar duro y a luchar por la general en la Vuelta.
En esa subida estuviste con Carthy, Bernal, Simon Yates....
Esa vertiente engaña bastante. Al principio no es muy duro, pero según pasan los kilómetros se hace duro, es un esfuerzo bastante explosivo y pasa factura. La idea era no dejarse llevar ningún día, apretar todos hasta el final y con rivales como Hugh Carthy, que estuvo en el podio de la Vuelta, y Egan Bernal, que ha ganado el Giro, y están bien, aunque tampoco a tope, estar cerca de ellos es importante.
La Vuelta empieza en Burgos, tu provincia talismán, donde has logrado cinco triunfos en profesionales y el tercer día llega el final en el Picón Blanco, que se subió la semana pasada.
La Vuelta a Burgos la he cogido siempre con muchas ganas. No sé si es porque la he corrido casi todos los años como profesional, si porque viví tres años en Burgos, que estudiaba para aparejador, los dos de aficionados y el de Orbea, hasta que al pasar al Euskaltel dejé de vivir ahí. Tengo sensaciones especiales cada vez que voy ahí y se me da bien.
Es la primera vez que vas a disputar la general de la Vuelta y desde 2015 no participas. Desde entonces has estado centrado en Giro y Tour. ¿Por qué tantos años sin volver a correrla?
Aquel año estaban Aru y Nibali, que se fue a casa los primeros días por el revolcón aquel, y sí será la primera vez que vaya con la intención de hacer la general. No correrla ha sido por mi cabezonería con el Giro, porque hice tercero una vez y siempre he querido igualarlo o mejorarlo. Y también porque el Tour es la carrera estrella y he querido estar también bien ahí y luego es complicado enlazarlo con la Vuelta. Pero este año sí la tenía en mis planes, quería correr el Giro, los Juegos y la Vuelta. Es lo que teníamos pensado. Me hace ilusión disputarla después de seis años y me apetece bastante volver a carreteras que conozco.
«Me hace ilusión volver después de seis años por mi cabezonería con el Giro, porque hice tercero una vez y siempre he querido igualarlo o mejorarlo»
La caída del Giro ha marcado los dos primeros objetivos de la campaña cuando afrontabas con más opciones una grande...
La verdad es que llegué muy bien al Giro, ha sido la vez en la que mejor me he presentado en una salida de una grande. Venía con un buen inicio de temporada, la condición era muy buena, tenía un equipazo, el recorrido prometía y... Después de la caída he pasado por muchos altibajos. Me costó recuperarme porque además de la clavícula tenía cuatro costillas rotas y una vez que empecé a entrenarme no tenía la continuidad que quería para estar bien para la Vuelta. Tenía recaídas con las lesiones y ha sido difícil darle la vuelta física y mentalmente.
¿La decisión de no correr los Juegos cómo se toma?
Hablé con el seleccionador, Pascual Momparler, y le dije que no estaba competitivo. Me estaba entrenando bien, pero me faltaba la intensidad necesaria para afrontar unos Juegos Olímpicos, una prueba de mucho fondo, y era inútil ir allí.
¿Molesta que a uno le responsabilicen de caerse cuando es derribado por otro corredor?
Afortunadamente no me lo dice nadie de mi entorno. El que lo dice supongo que es porque ha montado poco en bicicleta o porque ha tenido mucha suerte en la vida. Bueno, en la bici... porque en la vida no lo sé.
El Tour presentaba dos cronos largas y en la Vuelta la primera etapa son 7,1 kilómetros con la subida al Castillo y una final de 33,8 el último día que siempre es mejor después de una muy dura tercera semana, en la que con las fuerzas justas se esperan menos diferencias. ¿Esa ha sido la clave para apostar esta temporada por la Vuelta y renunciar al Tour?
Y porque la primera semana del Tour se preveía terrorífica como fue y las dos cronos me ponían muy por detrás de los favoritos. La Vuelta era la mejor opción. Las últimas cronos siempre son cómo llegues de fuerzas y marcan menos diferencias y la primera será explosiva. Me va a costar un poco porque llevo un tiempo sin apretar tanto y sin apenas poder coger la bicicleta de contrarreloj después de la caída, pero ha venido así e intentaré hacerla lo mejor posible.
¿Cómo ves una Vuelta montañosa con siete llegadas en alto?
Es un recorrido bonito. Me gusta. Está bastante bien organizado. Hay unas primeras etapas llanas, luego la montaña está más concentrada por bloques y me gusta el recorrido más que otros años. Con la crono y la primera llegada en alto el tercer día esperemos que la gente vaya a su sitio y que el ambiente en el pelotón sea más relajado de lo que ha sido el Tour. Hay etapas duras y las de Asturias son las que pueden marcar. Ojalá la carrera llegue abierta ahí.
¿Hay etapas peligrosas por el viento que puede aprovechar un equipo como el Movistar?
La primera semana tengo que estar muy atento. En la etapa de Burgos y la de camino de Albacete si sale viento se pueden complicar. Movistar es un equipo que corre en casa, están muy motivados y lo intentarán en cualquier escenario.
Bahrain llega a la Vuelta con un buen equipo tras rendir a un gran nivel toda la temporada. ¿Es el líder único a pesar de la presencia de Caruso, segundo en el Giro, y Haig, líder en el Tour, donde empezó muy bien?
Desde un principio han tenido la idea muy clara, han apostado todo por mí y no puedo estar más agradecido. El equipo del Giro me parecía muy bueno y éste me parece igual de bueno. Desde que vieron que empezaba a remontar y que la Vuelta podía ser un objetivo han decidido traer un buen equipo y estoy muy contento con ello.
¿Cómo ves a los rivales?
A Roglic lo veo como favorito número uno. Es un corredor que nunca falla. Siempre que está en la salida llega muy bien. La Vuelta es una carrera que le gusta y seguro va a estar adelante. Ineos presenta un equipazo con Carapaz, Bernal y Adam Yates y no me olvidaría de Movistar, que seguro que hacen una buena carrera y a Hugh Carthy. Subió al podio el año pasado y en la Vuelta a Burgos se le ha visto que está muy bien.
¿Con estos rivales cual es el objetivo de salida?
Viniendo de donde vengo, el podio sería un buen resultado. Me gustaría estar en la pelea del podio. Ojalá en la primera semana no sufra y no pierda mucho y que con el paso de los días pueda ser un objetivo real el podio.
«Me gustaría estar en la pelea del podio. Ojalá en la primera semana no sufra y no pierda mucho»
Ganar se ve como un objetivo demasiado complicado...
A día de hoy sí porque me planto en la salida con menos forma que otras veces. El nivel es muy alto últimamente y se me hace difícil verme sin ese punto de pedal, aunque Burgos me ha dado la confianza y espero estar mejor. Saldré a aguantar como sea la primera semana, minimizar las pérdidas, y pensar siempre en la última semana, que puede ser muy buena para mí.
¿Qué supone el regreso de Euskaltel Euskadi a la Vuelta ocho años después de la última participación?
Es muy bonito, como para todos los aficionados. Volver a tener al equipo de casa en la Vuelta es algo que nos ilusiona a todos y se ve que la gente está con ganas. Ya en la Vuelta a Burgos se acercó bastante gente para animarlos y ojalá los corredores y los aficionados disfruten mucho de esta carrera.
¿La presencia del Euskaltel en la Vuelta es la culminación del trabajo planteado cuando se asume la responsabilidad de la Fundación Euskadi o se aspira a devolver al equipo al Tour?
Por suerte no nos hemos obsesionado con un objetivo tan ambicioso como puede ser el Tour y sí que hemos buscado que el grupo de chavales que hay en el equipo crecieran con nosotros hasta llegar a donde se merecen. Que estén en la Vuelta da mucho sentido a todo el trabajo y al esfuerzo realizado.
Al subir a la segunda categoría ha tenido que dejar la presidencia de la Fundación Euskadi al competir en las mismas carreras sus dos equipos, pero se vio en Burgos que Bahrain dejó sin opciones la escapada con Mikel Bizkarra...
Cuando te pones un dorsal lo que toca es mirar por ti y por tus intereses, por los de tu equipo y cumplir con tus objetivos y hay que dejar de un lado el corazón. Pero sigo como el fan número uno del equipo, siempre estoy atento de lo que hacen y les sigo de cerca