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Chivite avanza la retirada las últimas medidas de prevención del covid en centros educativos

La presidenta navarra, María Chivite, avanza que «cree» que Salud y Educación levantarán las últimas medidas de prevención del covid que quedaban vigentes y que afectan, principalmente, a las unidades de convivencia y el servicio de comedor. 

La mascarilla fue obligatoria en colegios hasta finales de abril. (Gorka RUBIO | FOKU)

«Creo que en lo que tiene que ver con el ámbito educativo alguna decisión se tomará, pero se comunicará por Educación y por Salud. Ya estamos viendo que la incidencia va bajando, las hospitalizaciones van bajando y por lo tanto estamos en otra fase», ha señalado la presidenta navarra este lunes, en declaraciones a los medios de comunicación.

El último informe semanal del ISPLN apuntaba hacia un importante descenso de casos en Nafarroa, tras unas semanas con incidencias altas y gran número de defunciones (se ha pasado de 28 muertes semanales a 6 en un mes).

«Tenemos pocas personas en estos momentos ingresadas. En UCI solo hay 3 personas y seguimos atentos a las personas más vulnerables y a la vacunación, que tendrá que seguir avanzando», ha subrayado la presidenta.

Las medidas de control del virus en los colegios se caracterizaron por encontrarse entre las más severas a lo largo de la pandemia. No obstante, la última semana de abril decayó el grueso d eellas, eliminándose en ese momento la obligación del uso de mascarillas. 

Medidas que quedan en vigor

En una aclaración con fecha de 6 de mayo, el Departamento de Educación de Nafarroa envió un resumen a las direcciones de los centros para concretar qué es lo que seguía vigente.

En Infantil y Primaria, se mantenían los grupos estables de convivencia en espacios cerrados donde no se podía mantener una distancia de seguridad de 1,5 metros. Esto afectaba, principalmente, al servicio de comedor. 

Lo mismo para ESO y Bachilerato, donde había libertad de reunión a excepción del comedor, lugar en el que los grupos no podían interactuar entre sí. 

Las familias, desde esta última instrucción, ya podían acceder al interior del recinto sin necesidad de usar mascarilla (pasaba a ser una recomendación). 

En lo que se refiere a gestión de los casos potenciales se recomendaba no acudir al centro con síntomas compatibles de covid u otra enfermedad infecciosa. El centro, asimismo, debía informar a la familia en caso de que un alumno tuviera estos síntomas para recordarle que se abstuviera de llevarlo al centro. 

Para el caso en que el alumno estuviera ya en el centro presentando estos síntomas, debía procederse colocando al alumno una mascarilla quirúrgica». Seguidamente, «se contactará con la familia o tutores legales, en caso de que la persona afectada sea menor de edad, para que acuda al centro a recogerle. Si la persona es adulta, autónoma y se encuentra bien, se irá a su domicilio evitando contactos en el trayecto».

En lo que se refiere a casos de covid confirmados, el protocolo que seguía vigente a finales de junio remitía las pautas de actuación a las que estaban vigentes en ese momento para el resto de la población. 

Por último, se mantenía un refuerzo de las labores de limpieza e higienización del centro.