Lois Boisson, del infierno a hacer historia en Roland Garros

No sabremos nunca qué le hubiera podido pasar a Lois Boisson el año pasado en Roland Garros, cuando obtuvo una invitación pero no pudo participar al haberse roto el ligamento cruzado de la rodilla justo antes.

En 2024 nadie conocía a esta jugadora de Dijon. Ahora casi el mundo entero sabe quién es, porque ha vuelto al Abierto de Francia gracias a otra invitación y ha llegado ni más ni menos que a semifinales, contra todo pronóstico.

Este jueves tarde ha perdido contra Coco Gauff, pero quizás de aquí en adelante empiece lo bonito.

Lois Boisson y el desodorante

En realidad Lois Boisson se había hecho ya famosa, por supuesto sin quererlo. En este mismo 2025, en abril, durante el torneo de Rouen en un partido contra la inglesa Darriet Hart, fue acusada literalmente de «oler mal».

Se hizo viral la escena. Durante un cambio de campo, mientras Lois iba ganando 6-0 4-3, la británica pidió al árbitro que su rival «se ponga algún desodorante», porque según ella «olía fatal».

Al final del partido Hart pidió perdón en sus redes sociales atribuyendo su gesto a la tensión del momento. Y la propia Boisson (curiosamente, un apellido que significa ‘bebida’ en francés) se hizo un meme un poco artesanal, un fotomontaje llevando un desodorante en la mano.

Sin embargo, en este caso los aficionados habían puesto la atención más en Darriet que en Lois, que de hecho sería eliminada en segunda ronda de aquel torneo de Rouen, sin dejar mucho recuerdo. Queda claro que estaba lista, de todas formas, para acudir como invitada a este Roland Garros.

Hasta engullir a Andreeva

Un torneo, el Abierto de Francia de París, segundo evento del Gran Slam después del Australian Open, donde Boisson tenía que participar ya en 2024. Desafortunadamente a dos semanas de su debut, durante otro torneo, el Trophée Clarins, se rompió el ligamento cruzado de su rodilla izquierda.

Se trata de una lesión tan grave como poco habitual entre los tenistas, y que obligó Lois a quedar parada siete meses. Una cicatriz en su pierna izquierda como recuerdo, la voluntad firme de volver por lo menos a competir, la necesidad de dar un giro a su carrera después de haber acariciado el salto a la élite... Con esos ingredientes ha recuperado la forma en tiempo supersónico y se ha ganado otra wild card, otra invitación para el torneo de sus sueños a pesar de una posición lejanísima en el ranking femenino WTA, la 361.

El ligamento cruzado es una lesión poco habitual en tenistas y que la ha tenido siete meses parada

En los campos parisinos su Roland Garros ha ido de maravilla desde el principio, eliminando a la cabeza de serie número 24, la belga Mertens. Luego ha tumbado a la ucraniana Kalinina y a su compatriota Jacquemot (otra invitada) en tres agónicos sets.

En octavos de final la estadounidense Joanna Pegula, número 3 del ránking femenino, esperaba a Lois para sentenciar el pronóstico. Nada de eso. La americana se puso un set por delante antes de ser remontada por Boisson, inagotable corredora en el campo y sorprendente jugadora de toque y golpes de calidad: 3-6/ 6-4/ 6-4 y pase para los cuartos de final. Con su camiseta de tirantes azul, los muslos muy a la vista, también en cuanto a imagen Boisson se ha convertido en una revelación.

Y luego, la obra maestra, aprovechando un poco la inexperiencia de su rival, la rusa Andreeva, 18 añitos y el rictus de quien va a ser «engullida» emocionalmente por el campo central del Roland Garros, el Philippe Chatrier. Andreeva, la predestinada al éxito, contra una rival hambrienta. Tras dos horas y 8 minutos, un nuevo triunfo para Lois, con la rusa totalmente fuera del partido en el último juego, la clara sensación de ‘me quiero ir a la ducha ya porque no puedo más’.

Con esta llegada a semifinales ha ganado 300 posiciones en el ránking y ya no necesitará ser invitada a los grandes torneos

Asegurado un puesto en la semifinal contra Coco Gauff, otra brillantísima estrella del tenis, otra predestinada al éxito pero más mayor que Andreeva, Lois estaba ya en la historia de este torneo, donde ninguna invitada había nunca llegado tan lejos.

La clara derrota 6-1/ 6-2 contra la estadounidense este jueves no entierra sus maravillosos diez días parisinos. Ganará 300 posiciones en el ranking y ya no tendrá que ser invitada, porque su nivel resulta suficiente para participar en los mejores torneos.