UPN, PSN y PP aprueban una «moratoria descafeinada» para las macroplantas de biometano
UPN, PSN y PP han unido sus votos en el Parlamento de Nafarroa para sacar adelante una enmienda in voce que aprueba «una moratoria descafeinada» para las macroplantas de biometano, como la han calificado EH Bildu y Contigo-Zurekin, ya que no parará un buen número de proyectos en tramitación.
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Una «moratoria descafeinada» para las macroplantas de biometano en Nafarroa es lo que han terminado aprobando en el Parlamento UPN y PSN a través de una enmienda in voce de sustitución que han pactado y que ha contado con el respaldo del PP. Contigo-Zurekin ha mostrado su profundo malestar y ha asegurado que supone «un antes y un después en este Gobierno».
El intento de poner coto a la proliferación de macroplantas de biometano en Nafarroa había llegado al Parlamento a través de una propuesta de Geroa Bai, EH Bildu y Contigo-Zurekin.
Como ha explicado el portavoz de Geroa Bai, Pablo Azcona, para defenderla, se trataba de aprobar una moratoria de dos años para la tramitación de nuevas instalaciones de macroplantas de este tipo, ya que no afectaría a las que tienen una capacidad de tratamiento anual que no supere las 10.000 toneladas anuales.
E iba a afectar a proyectos presentados con posterioridad al 01/01/2023 y sobre los que no haya recaído resolución firme de autorización en vía administrativa.
Esta moratoria finalizaría con la aprobación del nuevo decreto foral regulador de la gestión de estiércoles y digestatos que está elaborando el Ejecutivo.
Azcona ha puesto el acento en que, sobre este tema, «existe una preocupación en la sociedad navarra» y que resulta imprescindible «parar y planificar» ante la avalancha de solicitudes de macroplantas hasta que sea aprobado el citado decreto foral regulador.
Ha recordado que un informe de Medio Ambiente ya abogaba por esa moratoria y que otro informe jurídico del Parlamento de Nafarroa establecía que podía tener efectos retroactivos, ya que «no hay vulneración de seguridad jurídica y no hay responsabilidad patrimonial». Incluso una sentencia del Tribunal Supremo español ha avalado esas circunstancias.
Estos motivos que apoyarían la paralización de todos los proyectos en trámite en estos momentos han sido respaldados por EH Bildu a través de Adolfo Araiz, quien ha alertado de que se está pasando de «un modelo de cercanía» en el tratamiento de estos residuos a otro «más industrial que se quiere hacer de manera abrupta. Se está generando una burbuja especulativa».
Y ha denunciado que la enmienda acordada por UPN y PSN lo que genera es una «moratoria muy descafeinada, un traje a medida de determinadas empresas. Se plantea una moratoria para doce meses y va a haber una serie de supuestos a los que no se va a aplicar la moratoria. La enmienda está dirigida a determinadas empresas».
Contigo-Zurekin toma nota
En el mismo sentido se ha expresado, especialmente dolido, el portavoz de Contigo-Zurekin, Carlos Guzmán, quien ha anunciado a los representantes de plataformas contrarias a esas macroplantas que seguían el pleno como público en la Cámara que «vuestros deseos no van a poder cumplirse».
Acto seguido ha cargado contra el PSN al denunciar que su socio de Gobierno «va a legislar de la mano de UPN» en este caso. Airado, ha señalado que «tomamos nota» y que ese acuerdo en torno a la enmienda «supone un antes y un después en este Gobierno».
Ha calificado la actitud del grupo de Chivite de «ejercicio de filibusterismo político» y que de UPN, podían esperar una propuesta así, pero «no del PSN, que parece que vuelve a aquellas andadas conservadoras. Es una moratoria descafeinada, un engaño».
El PSN, a través de Carlos Mena, se ha aferrado a la seguridad jurídica para justificar su acuerdo con UPN señalando que «estamos a favor de la moratoria, pero no de la paralización de proyectos en estado muy avanzado y generar inseguridad jurídica. Moratoria sí, pero con condiciones». Y ha asegurado que el texto finalmente aprobado «refuerza la seguridad jurídica, evita litigios y permite al Gobierno planificar sin paralizar de forma indiscriminada inversiones».
Esa actitud ha sido criticada por Azcona en su turno de réplica afeando al PSN que «proponen planificar después de ejecutar y eso carece de sentido común», y que esa moratoria aprobada «no va a parar un buen número de proyectos en tramitación».
«Solvente jurídicamente»
UPN ha mostrado su satisfacción por haber sacado adelante su enmienda con el respaldo del PSN recalcando su portavoz, Miguel Bujanda, que es una propuesta que es «seria, solvente jurídicamente y socialmente responsable ante un despliegue propiciado por los grupos que sustentan a este gobierno. Era tan mala la proposición de ley que se la han tenido que autoenmendar».
Ha añadido que así se podrá «elaborar un plan estratégico en el que se delimitará zonas aptas y no aptas, y garantizamos que, desde el inicio, la participación municipal y sectorial sea prioritaria».
En el mismo sentido, se ha expresado Irene Royo, del PP, que ha respaldado la enmienda porque supone «una moratoria, pero condicionada. Hay que darse un tiempo para organizar y dar una solución a futuro duradera que dé respuesta a la transición energética con protección de la salud y ambiental».
Moratoria condicionada
El texto finalmente aprobado establece un plazo máximo de 12 meses desde la entrada en vigor de la Ley para que el Gobierno de Nafarroa evalúe el estado de desarrollo de los proyectos de generación de biometano existentes en el herrialde. Durante ese período, no se admitirán nuevos proyectos por parte de ninguna administración pública competente.
Respecto a los expedientes administrativos en fase de tramitación, quedarán suspendidos cautelarmente, salvo que se haya completado la fase de información o exposición pública y, además, se encuentre en fase de propuesta de resolución, con todos los informes sectoriales vinculantes favorables.
Quedarán expresamente excluidos de esta suspensión los proyectos que con anterioridad a la entrada en vigor de esta Ley hayan obtenido una resolución de autorización ambiental integrada —incluida la evaluación ambiental y la compatibilidad urbanística— o, en su defecto, hayan sido declarados proyectos de interés foral por parte del Gobierno de Nafarroa.
En todo caso, la suspensión cautelar finalizará antes del 30 de septiembre de 2026 o, de anticiparse a esa fecha, en el momento en que entre en vigor la normativa foral sobre fertilización orgánica en zonas vulnerables.
Concentración de las plataformas
Mientras se trataba la cuestión de la moratoria en el pleno del Parlamento, en el exterior de la Cámara, se han concentrado las Plataformas Navarra STOP Biometanización.
En concreto, representantes y vecinos de las localidades de Sesma, Lodosa, Los Arcos, Viana, Rada, Melisa, Alcanadre, Mendabia, Arronitz han protestado contra la construcción de plantas de biometano sin medidas de control y que afectarían a las zonas.
Durante la protesta se han escuchado cánticos como «Menos metano, más aire sano», «Parlamentarios, escuchad, no os vamos a votar» o «Moratoria ya».
Mertxe Arnedo, representante de las plataformas, ha explicado que lo único que piden es que se haga un diseño de política pública razonable.
«Hay que ver qué es lo que necesitan nuestros ganaderos y nuestros agricultores. Ahora mismo hay 17 proyectos, se plantean cerca de 1.300.000 toneladas de residuos, que desde luego no proceden de la zona», ha indicado.
El ‘quesito foral’ aprueba una moratoria «trampa»
Tras conocerse lo aprobado finalmente en el Parlamento de Nafarroa, el presidente de la Fundación Sustrai Erakuntza, Pablo Lorente, ha calificado la moratoria que ha salido adelante como «falsa, que es una trampa para colar los intereses privados de determinadas empresas, algunas de ellas posiblemente sin ningún tipo de actividad y que lo que van a hacer simple y llanamente es facilitar la entrada de un modelo industrializado para el tratamiento de residuos que van a conllevar una mayor contaminación de los suelos en Navarra y un deterioro de la agroganadería en nuestro territorio».
Tras insistir en que «es un ataque a la biodiversidad, al medio rural», ha denunciado que «volvemos a ver cómo se reedita el famoso ‘quesito foral’ de décadas pasadas con el acuerdo de PSOE, UPN, PP». Y ha considerado «lamentable las mentiras que hemos podido escuchar hoy en el Parlamento, los miedos infundados sobre temas de legalidad ante una moratoria real que es la que se tendría que haber votado y que es la que no ha salido adelante».
Ha concluido indicando que «las contradicciones del actual Gobierno de Navarra las tendrán que resolver ellos, pero, desde luego, lo que está claro es que desde el Ejecutivo, se siguen tramitando proyectos tanto de macrogranjas como de plantas de biometanización, o la facilidad para llevarlas a cabo. Hoy, concretamente, en el Boletín Oficial de Navarra sale una tramitación para facilitar la conexión de biogas a la red por parte de una planta en Artajona».