Iulen Lizaso Aldalur

Biografía de un expolio (I)

Es legítimo luchar a favor de mayores cotas de soberanía también para la ciudadanía vasca, hasta llegar a ejercer el derecho a decidir que nos asiste como pueblo. Pero con una Constitución que impide ese derecho, y que hoy más que nunca y en progresión, los indicadores de regresión socieconómica, son alarmantes, hagamos primero sociedad.

Cuando en EH Bildu aseguran sentirse «cómodos» en el acuerdo de nuevo estatus con el PNV, salvando distancias y envergaduras, me recuerdan a la misma chanza que califican los medios, las palabras del expresidente Aznar tras pasar por la comisión ¿de investigación?: me lo he pasado muy bien.

El líder de la izquierda abertzale nos invita a: no mirar únicamente a largo plazo, sino a trabajar también en el presente por resolver los problemas de la gente en el día a día. Palabras que chocan frontalmente en el tiempo con las de Txiki Muñoz en coincidencia con Lander Martínez de Podemos Euskadi: EH Bildu ha decidido hacer los acuerdos de país con el PNV y no está priorizando la agenda social... haciéndolas extensivas a LAB.

En ese ping-pong mediático, LAB achaca a ELA no hacer nada para impulsar el proceso soberanista, y hete aquí que ya estamos como con el viejo dilema de las demandas soberanas de Cataluña de hace cuatro siglos cuando Francisco de Quevedo con gracia castellana preguntaba si en el fondo de las mismas se estaba: por el huevo o por el fuero.

Es legítimo luchar a favor de mayores cotas de soberanía también para la ciudadanía vasca, hasta llegar a ejercer el derecho a decidir que nos asiste como pueblo. Pero con una Constitución que impide ese derecho, y que hoy más que nunca y en progresión, los indicadores de regresión socieconómica, son alarmantes, hagamos primero sociedad, pues de conocer la base abertzale la cruda realidad que nos ocultan (lo impide la propaganda institucional y sus medios) pienso que se «tiraría» más a por el huevo que a por el fuero.

En la CAPV, las personas que están debajo del umbral de la pobreza alcanza el 19% siendo mujeres 3 de cada 5, y otro 20% con dificultades para llegar a final de mes. Por mas que el lehendakari se «corone» con la RGI solo el 35% de familias bajo ese umbral la cobran, siendo pensionista nativos uno de cada cuatro, con pensiones irrisorias de hasta 625 euros. En 2018 el 57,1% de dependientes reconocidos no recibe ningún servicio público, tampoco sus cuidadoras... es la foto del territorio que está a la cabeza del PIB europeo.

El «techo» del Pacto de Toledo-95 está lejos de lo recomendado en el Tratado de Lisboa de la UE que marcó un «suelo» de umbral de pobreza rebajado para tiempos de crisis en 1.080 euros, hoy actualizado por la OCDE en el 50% del PIB per cápita que en la CAPV son 1.392 euros. Así, no causa sorpresa las palabras del portavoz de Elkarrekin Podemos en el Parlamento Vasco: «Urkullu pinta una Euskadi de gominola», al denunciar Lander Martínez su discurso autocomplaciente en no querer entrar a fondo en lo que «son los problemas reales con los que se enfrentan los ciudadadanos vascos» como precarización de las condiciones de vida de la gente trabajadora y pensionistas, conciliación familiar, maternidad y crianza, atención 0 a 3 años, dependencia, etc. que es la verdadera mayoría del país, ya que si Euskadi no está tan mal «es gracias a la gente que trabaja diariamente y no por su afición a reunirse con la patronal.

La economista Nekane Jurado define: «Un sistema de pensiones, sea de reparto o capitalización, es un mecanismo para transferir la renta desde las clases activas (trabajo y capital) a las clases pasivas (jubilados y todos quienes no tienen edad laboral). El problema, por tanto, reside, en si disponemos o no de la renta suficiente para ser transferida intergeneracionalmente». El estado en labores de recaudador, administrador y distribuidor, es quien como puente, extiende los brazos y del todo que toma de un lado, parte lo entrega en el otro... las palabras del expresidente Rajoy, en febrero de 2018 presintiendo que las movilizaciones de los pensionistas podían descolocarle, les espetó con el típico mantra de la derecha ramplona y mentirosa de allí y de aquí: «Si no hay dinero de donde quieren que lo saque»... son todo un fraude público.

Al ser la democracia económica altar de la justicia social, la frase guarda la esencia de la memoria histórica del expolio infame que en España, sus gobernantes y sindicatos mayoritarios han hecho con la «Banca de los trabajadores», para trasvasarlo a la banca de los capitalistas y a ellos mismos.

No es un conflicto de falta de recursos, es un problema de reparto de la riqueza y privilegios de manera muy desigual entre dos clases sociales. Y apuesta por crear mecanismos de redistribución de rentas a través del sistema presupuestario y fiscal. De ello surgen dos preguntas que tienen que ver con las dos inyecciones ácidas que históricamente agostan las raíces del árbol de las pensiones: 1) Ya que tienen pensiones máximas y apenas cotizan en cuantía y tiempo ¿porqué a pensiones y prestaciones de políticos y militares de este país, no les afecta el «techo» del Pacto de Toledo y van a cargo de los PGE y a la mayoría nos ponen el corsé al condicionarlas al «balanceo» de una Seguridad Social saqueada históricamente para encubrir desmanes políticos? Y 2) alegan no poder atender mas que a una de las reclamaciones (subida con el IPC sin carácter retroactivo) escalonadas según exigencias de plataformas de jubilados y pensionistas, por la baja recaudación a través de cotizaciones por rentas de trabajo ¡hoy!, (sin evaluar que es debido al paro estructural, precariedad salarial, temporalidad, precariedad laboral por ellos provocada), cuando si se hiciese una evaluación del balance en 40 años, la millonaria recaudación por cotizaciones relativa a la ínfima distribución en pensiones y prestaciones, posibilitaria que hoy esa caja estaría a rebosar. Saberlo, nos llevaría las manos a la cabeza... o a tribunales europeos a más de un expresidente y líder sindical.

¿Por qué la izquierda ¡toda! nunca quiso poner aquí el foco cuando es el mayor escandalo de la Transición? ¿Por qué es tan permisiva con esta inmoralidad política, cuando mantener privilegios de esa casta resulta insostenible, al provocar ese desfase en la cohesión social y democrática con la UE? Hoy al gobierno español le piden de Bruselas que corrija, ¿por qué esa izquierda que calla, no pide en el Parlamento una Auditoria para saber la recaudación en 40 años, del sudor y lágrimas de las rentas de trabajo e ingresada en los Fondos de la Seguridad Social y que han trasvasado a empresas y rescate bancario? Hoy nos piden apañarnos con lo que dan de si las cotizaciones de trabajadores y si los números no alcanzan o la hucha está vacía, los pensionistas de clase B recemos y los trabajadores hagan un plan privado de pensiones... ¿sugieren el mismo plan a políticos y militares? ¿donde situar a jueces, fiscales y clero?

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