Es muy significativa la lucha de las universidades estadounidenses para reivindicar el final del genocidio en Palestina y el derecho de este pueblo a ser libre. Los esfuerzos del sionismo con falsas denuncias de antisemitas se le están volviendo en contra. Los estudiantes y colectivos de trabajadores, entre los que hay judíos americanos, dejan al criminal de Netanyahu como lo que ha sido toda la vida, un personaje de la contrainformación. No cabe duda de que, como escribe Khared Balakat, esta lucha va más allá de intentar denunciar el sufrimiento del pueblo palestino y el derecho a defenderse, el expolio de tierras, los asesinatos indiscriminados, la generación de hambruna y la falta de todo tipo de materias imprescindibles para una vida mínimamente digna. Este genocidio no ha comenzado el 7 de octubre, sino que lleva desarrollándose demasiados años en todo Palestina, y, especialmente, en Gaza.

Durante muchos años, instituciones internacionales vienen insistiendo en la situación de inhumanidad generada por el Estado sionista en todo Palestina y presentando a Gaza como un lugar muy poblado donde no se garantizaba el derecho a la vida. Pero pese a las denuncias, los gobiernos europeos continúan apoyando y manteniendo todo tipo de relaciones con un gobierno que utiliza todos los métodos a su alcance para generar muerte y expulsión de la población nativa en Palestina, incluido el genocidio, y como siempre, es la sociedad civil la que, ante la pasividad e incluso colaboración de nuestros gobiernos con este genocidio, debemos de salir a la calle a denunciar la situación y su colaboración.

A muchas personas nos ha sorprendido este movimiento juvenil estadounidense, que está siendo fuertemente reprimido por las fuerzas policiales estadounidenses, y con amenazas del sionismo de hacerles la vida imposible por todos los medios a su alcance, tanto en su carrera estudiantil como en su desarrollo tras esta. Nos están dando una lección muy grande de cómo defender los derechos humanos.

Esperemos que los y las estudiantes y las personas obreras de los países occidentales, y de la UE en concreto, recojan la antorcha y se sumen a las protestas de esta envidia de juventud contra la mayor masacre del siglo XXI, televisada e incluso con alardeo por parte del sionismo y todos los países mal llamados democráticos y del primer mundo. Parece que comienza un contagio de esta iniciativa en ciertos lugares de la UE, incluida la Universidad de Valencia, donde el lunes comenzaron una acampada en el campus de Filosofía, aunque creemos que se tendría que extender al resto de universidades del Estado. Desde la sociedad de Euskal Herria, no así desde instituciones como el Gobierno Vasco, empresas armamentísticas o CAF, hemos mantenido siempre una sensibilidad hacia la causa palestina, ahora es muy ilusionante que también la juventud de Euskal Herria comience a movilizarse en nuestras universidades, aunque enfrentarse a esta situación pensamos que merece una huelga general de estudiantes y clase obrera, y unas protestas mucho más contundentes de las que estamos haciendo. Desde la plataforma Palestinarekiko Erantzukizuna animamos a ello.