Elias Anton Murgiondo

Laborar el futuro

Una vez renovada la representación municipal en Iruñea y pensando en el presente vivido bajo el bastón de mando de la extrema derecha, de sus imposiciones y de su despotismo pacato, imaginando el nuevo futuro y con la ilusión correspondiente que ello ha generado, se me ocurren varias reflexiones sobre lo que, a mi juicio, debieran tenerse en cuenta. Hay un asunto que viene de atrás y que está en la mente de gran parte de la población y que tiene que ver con la Memoria Histórica: el Monumento a los Caídos. Considero que lo ya estudiado con anterioridad debe ser actualizado y consultado con prioridad, para que el tiempo corra en favor de una pronta solución. Ese monumento fascista que proviene del capricho impositivo de Franco y los franquistas navarros, fruto de los asesinatos que sin «frente de guerra» se cometieron en esta tierra (más de 3.500 personas) con total impunidad y con la colaboración del requeté-falangismo y la Iglesia no merece ser acogido en nuestra ciudad y debiera ser derribado para limpiar y honrar a las víctimas y sus familias, además de lograr la necesaria justicia representativa.es una forma de frenar la doble moral que tanto UPN, PP y Vox demuestran cuando consideran que el levantamiento franquista fue necesario y que los derechos de las naciones sin estado ponen en peligro la salud democrática de su manoseada España. Como alternativa al monumento propongo un parque verde que permita el paso del aire limpio desde Elomendi hasta la Plaza del Castillo.

En estas circunstancias concurren diversos compañeros de viaje y estructuras peligrosas que trastornan el panorama político y de convivencia, como son la Iglesia y las sectas religiosas (como el OPUS DEI) con influencia perversa en Nafarroa. Hay que valorar la influencia de la Iglesia Católica con sus interferencias partidistas en lo que se refiere al apoyo a la extrema derecha de manera constante, viviendo con los apoyos económicos de un estado laico, manteniendo sus memeces ahistóricas y sus cuentos sobre dioses, vírgenes y santos que todo lo emborronan y confunden a amplios sectores poblacionales a la hora de tomar decisiones libres y honestas. No es posible entender que en pleno siglo XXI y con los avances científicos subsistan mensajeros de cielos e infiernos, con premios y castigos que nada tienen que ver con la realidad de la vida natural. El expresidente del PP, José María Aznar, propició a la Iglesia católica la potestad para inmatricular todo tipo de edificios, terrenos y sociedades que consideraba propias, aunque los verdaderos afectados y usuarios discreparan de tal actitud, con lo cual se impone el trabajo por luchar con energía por devolver a los pueblos las inmatriculaciones impuestas e ilegales, cuestión que la Iglesia lleva como pecado por el mandamiento de no robar. No olvidar que el capitán general castrense y con pistola lo era el obispo −arzobispo de Iruñea y Nafarroa, máxima autoridad eclesial-militar en el Estado.

El Marqués de Peralta, santo patrón y fundador del Opus Dei, se hizo amigo del difunto Carrero Blanco y se propuso convertir a Iruñea en Torreciudad 2; Escrivá de Balaguer, con voz aflautada y modales sectarios, propició el desembarco de la Obra en nuestra ciudad y se rodeó de toda la carcundia reaccionaria y derechista que fluía con naturalidad por la capital de Nafarroa, con el apoyo de las autoridades locales logró instalarse a orillas del Río Alrevés y edificar la mal llamada Universidad de Navarra (cuando su denominación debiera haber sido Universidad del OPUS DEI en Navarra). La secta no ha dejado de crecer y el apoyo de sectores de la derecha ha influido en su desarrollo, protegiendo con las variantes el terreno público denominado Campus Universitario, rellenando de edificios propios su amplio espacio y ocupando zonas que corresponden al libre uso de la ciudadanía navarra.

Sería cuestión de analizar ´la situación actual de la ubicación de las instalaciones de la secta y recuperar lo que ya denunciaron en su tiempo Miguel Ángel Muez y Víctor Moreno, a través del libro que me toca releer «Universidad del OPUS: historia de un expolio». No es de extrañar que haya dolido tanto la Moción de Censura a la militante del Opus, la señora

Cristina Ibarrola, pues se frotaban las manos ante nuevas posibilidades con su puesto de alcaldesa y sus manejos posibles e impunes. No olvidar las torres de la Media Luna como desastre urbanístico para favorecer a una entidad religiosa y desarrollado desde una alcaldía derechista e impositora. En casi todas las circunstancias del desarrollo humano emerge la imposición de la religión o su influencia embustera acerca de la solidaridad y el respeto, ofreciendo futuros falsos y vidas felices tras la muerte, cuando el matar en vida les resulta tan fácil apoyando al capitalismo explotador.

La Moción de Censura ha supuesto un vuelco clave para desatar todas las iras de la extrema derecha y enfangar cualquier idea unitaria que suponga progreso. El hecho de que Joseba Asiron haya sido elegido alcalde de Iruñea ha destapado la caja de los truenos y está permitiendo comprobar la ínfima calidad de los políticos que creían que iban a controlar el poder e imponer sus reglas retrógradas a los pueblos y naciones que conforman el Estado. Las agresiones e insultos gratuitos hacia EH Bildu no paran y el apelativo de «terroristas» suena natural, como si nada hubiera cambiado y los tiempos de la tortura y los asesinatos del GAL, el BVE, la Triple A y las torturas y los ataques mercenarios fueran actos amables de los «demócratas» herederos de Fraga y sus aliados reformistas, todo ello sin despeinarse y con lengua bífida.es lo que pasa cuando consideras que la suma de los contrarios sobrepasa a la unión de las fuerzas propias, recibiendo el mamporro en la cara y despertando del sueño del poder imaginado, donde ya tenían repartidos los sillones y los cargos, unidos los corruptos con los gatilleros a la espera de ilegalizar y «hacer justicia»; resulta muy difícil de digerir y asimilar. Los exabruptos de Feijóo o Sémper (moderados ellos...). Aburren sobremanera y establecen la ínfima categoría de sus mensajes a la hora de enfrentarse al contrario; Feijóo dimitirá y es posible que no se dedique a la política, pues ya tiene un amigo con yate para trasiegos..., nos haría un favor a los oyentes y telespectadores, pues sus mensajes resultan discapacitados y repetitivos. Sémper sigue la línea que le mandan. Esparza llora por las noches y grita por el día. Asiron, sin embargo, convoca, dialoga y abre caminos de esperanza preparando el futuro, trabajando para toda la ciudad y escuchando sus propuestas para mejorar las infraestructuras de los barrios y la propia ciudad. Gora herria!

Euskal preso eta iheslariak etxera!

Bilatu