Esta semana se ha producido un tenso debate en el Parlamento Vasco sobre el tema de la okupación que evidencia las diferencias al respecto entre izquierda y derecha. Okupación, ¿es el gran problema de vivienda que tenemos en España? No hay un solo día que no veamos en ciertos Medios de comunicación y programas de televisión que no se hable del tema de la okupación como uno de los grandes problemas de Vivienda que tenemos en este País. Pero, ¿realmente es así o responde al interés de ciertos colectivos y entidades en presentarlo como tal?

Analizamos el tema con datos:

Las denuncias por okupaciones de vivienda han repuntado un 7,4% en 2024 en el conjunto de España, con 16.426 hechos conocidos por las Fuerzas de Seguridad, incluyendo tanto los delitos más habituales de usurpación de vivienda como los más graves de allanamiento. Cataluña se mantiene a la cabeza, al anotar 7.009 casos, lo que representa el 42% del total.

El primer gran tema es que estos datos no distinguen entre usurpación y allanamiento de morada. La diferencia entre ambas es trascendental y se basa en que la usurpación es de una vivienda que podríamos considerar como abandonada y el allanamiento de morada es sobre una vivienda habitada tanto habitualmente como una segunda residencia o de temporada y, tanto la respuesta penal como la actuación judicial y policial, es muy diferente en un caso y en el otro.

En el caso del allanamiento de morada, se trata de un delito con reproche penal grave y desalojo policial inmediato, y en la usurpación de una vivienda abandonada, se puede ir por vía penal o civil, y la respuesta judicial y policial variará en función de la vulnerabilidad de quién usurpa la vivienda y de la saturación de los Juzgados.

El segundo gran tema es que, según los datos de la Fiscalía General del Estado, del total de okupaciones del último año, solo el 0,85% de los casos fueron allanamientos de morada, o sea, de los casos sangrantes que ves en los medios de la señora que ha ido a comprar y le han okupado la casa, o lo que es lo mismo, que el 99,15% de los casos denunciados de okupaciones el último año, eran de usurpaciones de viviendas abandonadas por sus propietarios.

Para corroborar esto, esta semana en el Congreso de los Diputados una representante de Junts, uno de los grandes impulsores junto al resto de la Derecha Española y Vasca de las normas para desalojar cuanto antes a todos los okupas-usurpadores, ha reconocido que el 96% de los casos de okupación-usurpación son de viviendas vacías de Bancos y Fondos.

Por lo tanto, está suficientemente probado con datos oficiales que el «gran problema» de las okupaciones responde a la necesidad de los bancos y fondos de vaciar sus pisos okupados para poder venderlos y a la defensa del concepto de derecho a la propiedad ilimitado que tiene la derecha de este país, incluso en casos de inmuebles abandonados.

Que la mitad de los casos de okupación sean de Cataluña es porque la mayoría de las viviendas desahuciadas en la crisis y actualmente en manos de Bancos y Fondos Buitre, se encuentran allí y en la zona mediterránea.

Es vergonzoso que muchos medios de comunicación, partidos políticos y ciudadanos desinformados y manipulados, actúen al servicio de la misma banca a la que rescatamos con dinero público sacado de la hucha de nuestras pensiones y no nos han devuelto nada, mientras nos restriegan sus beneficios. La misma banca que arrebató ilegalmente a cientos de miles de familias sus casas mediante el uso de cláusulas abusivas totalmente probadas hoy día como el vencimiento anticipado, cláusulas suelo, intereses de demora, usureros, etc. La misma banca que regaló esas viviendas a los fondos buitre Y Sareb para que especulasen aún más con ellas y la misma banca que lleva años maquinando con los Partidos de Derechas cómo echar a las familias vulnerables que okupan esas viviendas que nos pertenecen a todos y todas para seguir especulando con las mismas. La Sareb y las viviendas en manos de Bancos y Fondos son nuestras y no creo que ningún banco se atreva a decir lo contrario, porque las pruebas contra ellos son abrumadoras y la mayoría de ellos debería haber ido a la quiebra por sus actos ilegales. Por eso utilizan a sus Medios y Partidos afines de intermediarios para tratar de hacer leyes para recuperarlos lo antes posible.

Si los partidos y ciudadanos de este país nos uniésemos para que los verdaderos culpables de la crisis inmobiliaria de este País nos devolvieran lo que nos robaron, no estaríamos en esta situación, pero, como hacen con otros temas, nos tienen entretenidos mirando hacia otro lado para que no nos demos cuenta de la realidad. Con 60.000 millones se solucionarían los problemas de vivienda que tenemos, pero nadie tiene las narices de pedírselos a la banca ni cuando tienen beneficios históricos.

El otro problema que tenemos con este tema es más un problema de los tiempos de respuesta de la Justicia ante los casos sangrantes, que los hay y son indefendibles, y que los Tribunales y Administraciones tienen el deber de diferenciar claramente y dar una respuesta adecuada cuando están involucradas familias en situación de vulnerabilidad acreditada y también en los casos de lo que actualmente se denomina «inquiokupación», diferenciando y respondiendo a los casos de okupas profesionales del fraude de los casos de familias en situación real de vulnerabilidad y teniendo en cuenta tanto la situación de vulnerabilidad de los inquilinos como de los propietarios que pueden necesitar el dinero de los alquileres para pagar préstamos y gastos de la vivienda.

Contra los bulos, información y datos reales.


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