Inmediatamente compramos un local en C/ Carmen 22, rehabilitándolo nosotros mismos como sede social, pagándolo con mucho esfuerzo, dada nuestra precaria economía.

Fueron pasando los años, los socios se fueron renovando con salidas y entradas de sucesivas hornadas. Aunque las salidas al monte disminuyeron, la actividad social continuó y entre todos se mantuvo y mejoró un bonito local, como base de actividades socio-gastronómicas.

¿Rehabilitación del local? Venta y presunto reparto

Por el año 2009, el Ayuntamiento de Pamplona obliga a los propietarios del edificio a costear las obras de rehabilitación integral.

La Junta del Club, en Asambleas convocadas al efecto, condiciona la permanencia como socios a la aportación económica de cada uno para dicha rehabilitación. Unos socios optan por abandonar el Club y otros son expulsados por impago de cuotas, algunos sin efectuar el trámite previsto en los Estatutos.

Sin embargo, en mayo de 2012, los 11 socios que permanecen, deciden vender el local (160 m2) a la Peña El Bullicio Pamplonés por 22.000 €.

Además, deciden donar parte del dinero de la venta a 6 socios, que pertenecían también al G. E. Otxola. Estos inmediatamente se dan de baja. El G.E. Otxola, al poco tiempo, compra un local para sede social.

Gestiones oficiales para buscar una solución: Mediación y Arbitraje

En mayo de 2013, un grupo de 27 socios fundadores se dirige al Club, proponiendo consensuar otra alternativa al destino del dinero y a la situación de la entidad: readmitir a los socios desde 2009 y decidir entre todos el futuro: continuar como club, fusionarse con otro club similar o disolverse con arreglo a los Estatutos.

Al no recibir respuesta nos dirigimos a la Federación Navarra de Montaña y al Comité de Justicia Deportiva de Navarra solicitando mediación y arbitraje respectivamente, para, dirimir esta cuestión de la manera más ética y justa. Ambas opciones, que obviamente son voluntarias, son rechazadas por el Club Alpino Navarro.

Ante esta situación, la FNDME redacta una Declaración que es aprobada por la Asamblea de Clubes de Montaña de Navarra, que se puede leer, junto con la réplica del Club, en la web “www.mendinavarra.com.

Los socios fundadores, que fuimos los que creamos el patrimonio del Club, que no tenemos intereses personales de ninguna clase, nos sentimos legitimados moralmente para pedir que las actuaciones de la Junta Directiva se ajusten a las normas de la ética, más allá de su legalidad, ya que por origen, estatutos y sentido común, no son los dueños del patrimonio del Club sino sólo sus gestores temporales. Solo queremos que se salvaguarde el criterio de disfrute público y no particular del patrimonio del Club.

Por todo lo anteriormente expuesto, los socios fundadores y recientes del Club, a la vista de la venta del local social, el posterior destino dado al importe obtenido y su situación actual, solicitamos respetuosamente, de forma pública y expresa, al Presidente Kepa Tobes Iturria, a su Junta Directiva y a los socios que actualmente pertenecen al Grupo de Espeleología Otxola

Que acepten el sometimiento voluntario al dictamen del Arbitraje del Comité de Justicia Deportiva del Instituto Navarro de Deporte y Juventud del Gobierno de Navarra, como medio de solución más ética y justa.

(*) Firman este artículo también:Bingen Amadoz, Manuel Azcárate, Lola Bulnes, Pedro Etxeberria, Adolfo Etxegarai, Kiko Francés, Josebi Iriarte, Ramón Larráyoz, María José López, Ana Vilches, Amaia Zubieta (representando a un grupo de 28 socios).