Juan Mari Arregi

Solo se juzgó al mensajero de la muerte del trabajador de Euskalduna

El redactor de "Egin", el mensajero, que cubría a diario aquella reconversión y la comentaba como Daniel Udalaitz, fue el único que fue denunciado y juzgado. Y lo fue precisamente por un comentario, "Cinismo psocialista" en el que denunciaba la muerte de Pablo Larrazabal.

El pasado 23 de noviembre se cumplieron 37 años de la muerte de Pablo Larrazabal, trabajador de Euskalduna, víctima de la persecución policial en el interior del astillero vasco cuando luchaban por salvar sus puestos de trabajo finalmente destruidos por la reconversión salvaje que llevó a cabo el Gobierno del PSOE de Felipe Gonzalez avalado por el Gobierno Vasco.

Junto a Pablo, otro trabajador del mismo astillero se suicidó, miles de puestos de trabajo fueron destruidos, el astillero se cerró para hacer el actual Palacio Eskalduna, miles de familias fueron destrozadas y, desesperadas, se situaron en la incertidumbre ante su futuro. ¿No había ningún responsable económico, político y/o policial de semejante tragedia? ¿Los entonces responsables políticos como Felipe Gonzalez y sus ministros de Economía, industria como Boyer, Solchaga, Croissier, que diseñaron la política de reconversión o los responsables de la Policía como Barrionuevo, o sus delegados de Gobierno o gobernadores civiles como Julen Elgorriaga, Ignacio Lopez... o los cómplices entonces en el Gobierno Vasco no tuvieron ninguna responsabilidad política, judicial, penal? Pues no, ya que nadie fue llamado a declarar y mucho menos a sentarse en el banquillo de los acusados.

Sobre toda aquella tragedia solamente fue llamado a declarar y sentarse en el banquillo una persona que hizo de mensajero de aquel desastre y aquel horror. El redactor de "Egin", el mensajero, que cubría a diario aquella reconversión y la comentaba como Daniel Udalaitz, D.U., fue el único que fue denunciado y juzgado. Y lo fue precisamente por un comentario, "Cinismo psocialista" en el que denunciaba la muerte de Pablo Larrazabal, «víctima de la persecución policial en el astillero». Como se recordará la Policía Nacional invadió el astillero de Euskalduna, utilizó fuego real, los trabajadores huyeron y, en la huida, uno de ellos, Pablo, sufrió un infarto y falleció.

D.U. fue acusado de calumnias contra la Policía y los estamentos que la dirigen. Se reclamó para él tres años de prisión y multa de 240.000 pesetas o arresto sustitutorio de otros 125 días en caso de impago. El juicio desarrollado en la Audiencia Provincial de Bilbao se celebró años después, el 29 de noviembre de 1989. D.U., seudónimo de quien suscribe este artículo, fue absuelto. Según la sentencia, «actúa conforme a derecho quien obra en el ejercicio legítimo de un derecho», y «el rigor del comentarista político debe ser «juzgado» por los lectores, no por los tribunales».

Pues bien, 37 años después siguen sin depurarse las responsabilidades políticas, policiales y penales de toda aquella tragedia del astillero Euskalduna. En un comentario del mismo D.U. en "Egin", el día de su juicio, titulado, "El proceso clave, pendiente", decía lo siguiente:

«No se podrá hablar de democracia si se tapan las responsabilidades de aquella tragedia de Euskalduna y se criminaliza al mensajero. ¿O es que es mayor delito constatar unos hechos que ser responsables de los mismos que se saldaron con dos muertos (Pablo y el suicidado), numerosos heridos, pérdida de miles de puestos de trabajo, cierre del astillero? Por lo visto sí. Por ello, estén seguros que ese proceso clave pendiente nunca lo veremos. Esa es la democracia y la justicia del Gobierno del POE y sus acólitos!».

Pues ya ven, ¡han pasado 37 años de la tragedia de Euskalduna y ese proceso clave sigue pendiente! Como tantos otros procesos policiales, sociales, económicos y políticos de Euskal Herria.

Bilatu