Siamak Khatami
Politólogo

¡¿Todavía hay diferencias entre la izquierda y la derecha?! ¿Y qué pasó con la coherencia de cada movimiento?

En la República Popular China, parece que lo único que queda de la palabra «popular», es que el Partido Comunista se mantiene en poder con mano de hierro.

Yo, desde que era estudiante, me considero de izquierda. En mi época de estudiante, en los Estados Unidos, no veía ningún problema en llamar el sistema económico estadounidense imperialista (y lo hacía dentro de los Estados Unidos, no fuera), aunque mis padres me avisaban que tuviera cuidado con mi lenguaje, que llamase ese país capitalista, pero no imperialista. Me preguntaban de dónde había sacado mi conclusión y claro, mi respuesta era Lenin en su "Imperialismo: fase superior del capitalismo". Pero también es verdad que tan pronto como Marx falleció, Bernstein empezó a desarrollar sus ideas socialdemócratas rechazando la necesidad de una revolución y propagando la llegada al poder de la izquierda a través de elecciones, una idea que Lenin vehementemente ridiculiza, argumentando que la revolución era necesaria para el triunfo de los marxistas. Y hasta el día de hoy, aunque la mayoría de los de la izquierda son laicos, no todos lo son. Por ejemplo, yo personalmente, cuando investigaba el proceso de paz entre el Gobierno español y el movimiento ETA durante la presidencia española de Rodríguez Zapatero, pasé un día entero hablando con el Padre Alex Reid, sacerdote irlandés y mediador internacional en aquel proceso de paz. El Padre Alex Reid también era el Confesor de Gerry Adams, líder del partido Sinn Fein en Irlanda, y a quien muchos británicos consideran un exmiembro del IRA. Gerry Adams también firmó un libro que escribió para Rafa Díez Usabiaga, de LAB Sindikatua, a quien también tuve el honor y placer de entrevistar dos o más veces durante la misma época del mencionado proceso de paz. Hay muchos que consideran a Rafa Díez Usabiaga como el «Gerry Adams vasco». Este fue literalmente el término que usó Begoña Lasagabaster (de Eusko Alkartasuna) cuando la entrevisté.

En las políticas y pensamientos de líderes de gobierno en diferentes países por todo el mundo, vemos casos curiosos. Dentro del Estado español, por ejemplo, hay claras diferencias entre las declaraciones de Felipe González en los años recientes, y las políticas de Pedro Sánchez, aunque los dos son del PSOE. Y dentro de la actual coalición del Gobierno español, hay clara crisis entre Podemos y PSOE, e incluso dentro de Podemos (Yolanda Díaz versus Irene Montero). Formalmente, Egipto es una república socialista, pero en realidad, es una dictadura militar corrupta y muy amiga de los Estados Unidos. En Argentina, los peronistas supuestamente son un partido populista de la izquierda, ¡pero Carlos Menem (presidente de Argentina entre 1989 y 1999) también es peronista! En Rusia, el presidente Putin piensa que la destrucción de la antigua URSS fue una de las tragedias más importantes del siglo veinte, pero él mismo es muy corrupto, y recurre a todo tipo de maniobras y trucos solo para mantenerse en el poder. Llegó al poder en 2000, y de momento se ha asegurado su mantenimiento en el poder hasta 2036 y no sabemos si en 2036 va a dejar el poder a algún sucesor, o todavía seguir unos años más. En Rumanía, durante la transición desde el socialismo al régimen actual en 1989, incluso hubo violencia política, pero Rumanía sigue bajo un régimen extremadamente corrupto, con la pobreza muy extendida en el país, lo que ha dejado a una gran parte de la población con la única alternativa de emigrar hacia otros países de la Unión Europea. En la República Popular China, parece que lo único que queda de la palabra «popular», es que el Partido Comunista se mantiene en poder con mano de hierro. Y Corea del Norte ha seguido una política mucho más aislacionista, pero depende de China y Rusia como sus apoyos internacionales. Y China concede ese apoyo porque no quiere ser rodeado por aliados de los Estados Unidos, Japón y Corea del Sur. Para los Estados Unidos, esto crea una situación difícil porque, económicamente, los Estados Unidos y China son las dos potencias económicas mundiales más grandes; sin embargo, tienen diferencias bastante mayores y es difícil mantener la paz mundial en este escenario.

Hay otros casos por todo el globo que se pueden citar. Pero el resumen es que la única alternativa con la que yo me identifico, es la izquierda abertzale, y me enorgullezco de ser simpatizante de aquel movimiento. Es el único movimiento dentro del cual no hay conflictos, ni hay diferencias entre filosofía y políticas. Es el único movimiento coherente.

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