José Luis Herrero, Antton Azkargorta y Javier Guezuraga

Adiós a un amigo solidario

Hace pocos días ha fallecido Mikel Ugalde, amigo solidario que llevaba más de dieciséis años con nosotros en la pancarta que todos los días solíamos colocar a la entrada del campus de Leioa reclamando unos derechos denegados. No murió de coronavirus sino, probablemente, por el desgaste de un cuerpo bastante dañado por dolencias tanto físicas como síquicas que le acompañaron durante una buena parte de su existencia.

Nacido en Bergara, su vida no fue nada fácil debido a su especial sensibilidad por los problemas de nuestro pueblo que le afectaban a su salud. Profesor de la Escuela de Magisterio de Bilbo, una vez jubilado anticipadamente se acercó a nuestra pancarta para compartir nuestro día a día con sus alegrías y tristezas, con sus buenos y malos momentos, con todas las peripecias que una estancia tan dilatada trae.

Él fue, junto a otro solidario, Javi Guezuraga, un testigo permanente y agente activo de los acontecimientos y sucesos en los que nos veíamos implicados. En los últimos tiempos faltaba a menudo a su cita diaria debido a compromisos familiares y a su delicado estado tanto físico como anímico, pues sufría, como si fuera parte de sí, la situación de Euskal Herria y la de los presos políticos, ya que era un abertzale hasta la médula y participante asiduo de las concentraciones a favor de los prisioneros políticos vascos. En los últimos meses ayudaba a alguno de nosotros en temas relativos al euskera, otra de sus grandes pasiones.

El fallecimiento de Mikel, persona buena, sensible y generosa, nos ha afectado profundamente puesto que compartimos con él unas experiencias que forman parte ya de nuestros más importantes recuerdos vitales. Porque en la lucha común por una causa justa se comparte algo más que una simple amistad. En estos delicados momentos que vivimos queremos ofrecer nuestro más sentido pésame a su familia, especialmente a su mujer e hijos.

Estarás siempre en nuestro recuerdo, querido amigo.

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