Llevaba mucho tiempo sin escribir algo así en castellano; es bueno saber idiomas. Espero transmitir adecuadamente todo lo que tengo dentro. Como se dice en euskara: ondo esana gogoan hartu eta gaizki esana barkatu.

El pasado 9 de abril falleció Dámaso Lazkano, exconcejal de HB de Zierbena, luchador incansable y un ahobizi y belarriprest, aunque le costase reconocer lo de ahobizi. Damaso, zure euskara ere oso polita zen.  

Años de lucha junto a Pedro, su compañero en el viaje, dentro y fuera del ayuntamiento, el cual falleció hace ocho años. Ellos dos han sido durante muchos años el referente de la izquierda abertzale galipa, ellos han tirado del carro y les tocaron, además, años duros, que cualquiera que tenga un poco de poso histórico sabe bien. Les conocí desde bien pequeño. En el caso de Dámaso fue en la militancia donde pude conocerle mejor. La lucha por una Zierbena abertzale socialista nos hizo coincidir, con una ilegalización de por medio, pero eso no paró el proyecto.

Con Pedro no coincidí en la militancia, pero sí con Oskar, uno de mis compis de lucha hoy en día. En el caso de Pedro fue su faceta lúdica la que mejor conocí (en la lucha la risa es necesaria y ahora más que nunca). Allí donde iba se creaba un rollo de la hostia (barkatu). Cercano, transparente. Una de las primeras pegatinas que me puse me la dio él en fiestas de San Mamés y ese pequeño recuerdo me lo guardaré para siempre (jaia bai eta borroka ere bai). Por cierto, llevaba mucho tiempo sin acordarme.

Dos personas, dos padres, dos amigos, dos compañeros, dos patrones de la izquierda abertzale. No quiero imaginar la que estaréis montando donde quiera que estéis. Eso último lo he escrito con una sonrisa en la cara.

Aupa zuek!