Andréia Pereira

Gero arte, tío Alfonso

La timidez a veces pasa factura y muchas cosas que deberían ser dichas en el momento correcto acaban en un rincón del corazón y luego depositadas en un cajón del olvido. Menos mal que hoy día internet puede ser ese grito que solo susurramos en pensamientos. Pensamientos esos que no tuve valor de poner voz el pasado 29 de mayo en el acto de despedida de un gran hombre de Barakaldo.
Así que grito desde aquí para hacer saber que hay personas a la que podemos tardar en conocer, pero que tardaremos todavía más en olvidar. Alfonso Carlos Beraza Garay es una de esas personas. Empezó discretamente siendo mi tío político, luego se convirtió en un amigo leal y actualmente era un gran confidente. Largas y sinceras charlas tuvimos en nuestros muchos paseos. Estoy segura de que él me ha llegado a conocer mejor que mi propio padre.

Siendo egoísta, confieso que lo más triste de saber que él se ha ido, es darme cuenta de que yo tenía todavía mucho por aprender con él. Pero estoy agradecida por el honor que me dieron de ser parte importante en la última etapa de su vida.

Eskerrik asko, Mentxu.

Gero arte, tío Alfonso.

Bilatu