Sanchez ha sufrido un episodio de enajenación transitoria que le ha llevado, después de 45 años de especular con el pueblo saharaui, a plegarse a los deseos del sátrapa Mohamed VI y que su territorio sea transferido a Marruecos, en contra de la RASD. La Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum del Sahara Occidental (Minurso) a petición de la casi totalidad de los países de la ONU, ordenó a España como potencia descolonizadora el 29 de abril de 1991 la celebración de un referéndum de autodeterminación que España ha incumplido por servilismo al rey de Marruecos que presiona sobre Ceuta y Melilla porque que considera que pertenecen a Marruecos donde radican. Además de la presión de EEUU y Francia, que son las potencias colonizadoras que marcan el paso a España para que asegure el tránsito libre por Gibraltar. Sin embargo, ha ignorado los derechos de los saharauis reconocidos por la ONU. Pero se ha extendido un rumor de apariencia irrelevante, pero de los que «crean el derecho del vencedor». Según la prensa de EEUU , el influyente financiero P. Soros conminó a Sanchez a que abandone su actitud ambigua respecto a su responsabilidad como administrador del Sahara Occidental. Le exige asumir la demanda de Mohamed VI y declare al territorio bajo su administración una autonomía bajo soberanía marroquí. La prensa yankee insinúa que si Sanchez no cambia en favor de Marruecos, EEUU y Francia harían caer su gobierno. Así se explica el repentino cambio de 180 grados incumpliendo lo ordenado por Minurso y enfrentándose a la ciudadanía española y mundial tradicionalmente favorables a que el pueblo saharaui ejerza sus derechos y se libere de la tutela de la metrópoli dominadora. Sanchez debería sopesar las consecuencias si incumple la misión asignada, pues perderá los votos de la izquierda y se mete en una ratonera. Méritos ya está haciendo.