Olga Santisteban

Impuestos, los bolsillos y la patria

El reciente anuncio por parte del Gobierno de establecer una ley (mediante su aprobación en el Congreso de los Diputados) que regulará los impuestos a la banca y empresas eléctricas ha «levantado», cómo no, toda una serie de suspicacias y protestas por parte de bancos y empresas y de sus «poderosos» directivos y directivas, que dicen que al parecer la crisis no va con ellos y es totalmente contraproducente para sus intereses gravar un «poquito» sus grandes y en ocasiones obscenos beneficios. No han faltado voces, entre sus filas de que, de salir adelante la citada ley, tratarían de buscar «formulas» para no cumplirla o esquivarla. Curioso, ¿no creen? Tal vez nuestros banqueros y empresarios energéticos no conozcan otra «curiosa» historia. En la reciente reunión del foro económico de Davos (Suiza) se suscribió un documento por parte de un influyente grupo de milmillonarios en el que instaban a sus gobiernos a que les aumentaran los impuestos ante el aumento de las desigualdades que habían proliferado, de manera alarmante, sobre todo a raíz de la pandemia. El grupo en cuestión se hace llamar algo así como «patriotas millonarios» (no sé realmente si para lavar su cara o las ganas de contribuir al esfuerzo común) pero el ejemplo ahí está. Ignoro el orden de «prioridades» que tienen la banca y energéticas, a la hora de contribuir para su país, tal vez despejemos pronto las dudas. Por cierto, entre los firmantes de dicho documento, no había ni un solo milmillonario del Estado español.

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