Javier Orcajada del Castillo | Bilbo

Israel: ganador acusado de crímenes de guerra

El general Benny Gantz, actual jefe del ejército israelí (Tzahal), virtual ganador de las recientes elecciones presidenciales, ha sido denunciado por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU de crímenes de guerra. Le acusa Ziada, un palestino que vive en Holanda, de haber ordenado la demolición de la vivienda sabiendo ocupada por su familia en la que murieron sus seis miembros. Su abogado le acusa de que la operación estaba diseñada previamente por el gobierno israelí. El MAG (Procurador General Militar de Israel) investigó el caso y no halló responsabilidad de parte de los militares, argumentando que se trataba de una acción de guerra. Según círculos progresistas israelitas el MAG es el órgano judicial que se ocupa de blanquear las denuncias por las brutales operaciones militares del ejército en las que se conculcan los derechos humanos de los palestinos, por lo que su credibilidad tiende a cero. En realidad Gantz es un halcón que a lo largo de su trayectoria se ha distinguido por la contundencia y crueldad de sus acciones tanto actualmente como máximo responsable del ejército, como por su historial militar que se ocupaba de realizar razzias de castigo contra la población civil palestina. Implacable defensor de la doctrina del «ojo por ojo...» y partidario de «arrojar a los palestinos al mar» y contrario al cumplimiento de las resoluciones de la ONU respecto a los territorios ocupados. Ha sido agregado militar en la embajada de Israel en los EEUU. Como para esperar que la salida de Netanyahu del gobierno suponga alguna esperanza para paz. Con militares fanáticos como los que deciden la política sionista hay pocas esperanzas de paz para detener el genocidio del pueblo palestino. De ello somos todos responsables, unos por acción y otros por omisión.

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