Uno de los artilugios que los que lo fabrican esperan tener grandes dividendos son las gafas con IA. Dejando aparte las posibles aplicaciones sanitarias, las enfermedades neurológicas que provocará, ya que su uso indiscriminado que sucederá con toda seguridad, se convertirá en un catalizador de nuevas y desconocidas patologías. Surge una serie de dudas que van más allá del simple uso mayoritario. Pienso que Platón, acertaba al tener recelo respecto a los sentidos que los humanos tenemos, ya que no los consideraba como fuente de conocimiento. Podríamos poner infinidad de ejemplos pero hay uno que inunda los medios de comunicación en estos momentos, que es la voladura de una parte de una presa en el rio Dnieper. La podemos ver, oír, y casi oler el fango, que está produciendo la crecida de agua, y el sufrimiento de miles de humanos y de la muerte de infinidad de no humanos. Podemos ponernos nuestras gafas de sol, o estas de IA, pero en absoluto sabremos quién ha hecho semejante salvajada, y si previamente había alguien que estaba en conocimiento de ello. Por muchas gafas milagrosas que nos pongamos el saber profundo de lo sucedido, con este artefacto no nos proporcionará ninguna respuesta que nos aproxime a la verdad. Nuestra civilización piensa que la tecnología nos ahorrará esfuerzo para conseguir conocimiento. Es todo lo contrario, la tecnología hace que las preguntas se incrementen y que se necesite mucho más esfuerzo para ir avanzando en la inmensidad de lo que desconocemos. En cambio se practica todo lo contrario. Al escuchar que todo está en internet, recuerdo a los enciclopedistas, que también utilizaban la misma lógica y el resultado final fue las enciclopedias por fascículos, en que los ingenuos pensaban que encontrarían todas las respuestas a las preguntas fundamentales. Craso error, ya que vivimos en los peores tiempos para los saberes que sirvan para vivir todos en dignidad, ya que estamos a años luz de ello. En estos momentos que escribo, destaca la inundación provocada en una guerra inútil, y los incendios que contaminan a un gran número de población incidiendo directamente a la salud de las personas. ¿Para qué sirve tanta inteligencia artificial, si la animal es tan idiota?

Atentamente.