Enric Vivanco Fontquerni, Barcelona

Pandemia superada

Se lleva suficiente recorrido de la pandemia para extraer unas estadísticas que empiezan a ser representativas. Si se escogen tres casos como: Alemania, Francia, y Brasil. Todas son economías significativas capitalistas, con preponderancia de la liberal como Brasil, y Francia, Alemania, con matrices. El número de infectados varía con un máximo respecto a la población entre un 8.5% en Brasil, y un 2.3% en Alemania, Francia con un 8.2%. La diferencia de entrada es por la severidad de los respectivos confinamientos. Los porcentajes de fallecidos, las estadísticas son más similares: 2.3% en Alemania, 2.2% en Francia, 2.8% en Brasil. Por supuesto que todos estos datos son públicos, los reales se sabrán de aquí unas décadas. Con estos datos es suficiente para sacar ciertas conclusiones. El confinamiento ha sido imprescindible, la estructura sanitaria no estaba preparada para estas eventualidades sobre todo durante el inicio, que no se tenía ni idea de cómo tratar la enfermedad. La mortalidad inicial de las personas mayores en las residencias, respondió a unas condiciones de hacinamiento que son intolerables, y con una asistencia por parte de amateurs, que realizan este trabajo porque no encuentran otro. También por la medicalización absurda de la mayoría de las personas mayores, y de las residencias, que los tienen drogados para que no molesten, lo que los hacen muy vulnerables en cualquier contingencia. El sistema económico va a salir reforzado, ya que la mayoría de la población desde el primer día aspiraba a la vida anterior, lo que quiere decir que están encantados de la vida con el capitalismo cosmopolita actual. El problema que no pueden resolver es la crisis climática y la desaparición de especies. El modelo productivo, necesita un consumo energético que cada vez va aumentando, por la ampliación de la población con hábitos de países desarrollados, y por la implementación de nuevas tecnologías, que necesitan mayor consumo energético, y mayor necesidad de minerales. La transición digital implica una mayor cantidad de deshechos contaminantes, por mucho papel de celofán que pongan. Si se molestan en escuchar y estudiar con geólogos, y climatólogos, la inmensa mayoría está exponiendo la urgencia de soluciones estructurares, y no la verborrea de los políticos, y empresas trasnacionales, que mienten y también que no tienen ninguna inquietud para escuchar a los que saben. De esta se han salido, pero la deriva hacia lo desconocido, sigue cada vez a paso más acelerado. La opinión generalizada de los expertos es que la especie humana como está orientada en la actualidad desaparecerá. Esto no es ningún catastrofismo, es algo que se puede saber, simplemente hay molestarse, y pensar por medio de los conocimientos de los que llevan décadas estudiando la deriva actual.

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