Bixen Trujillo

Posibles razones del inusitado interés de Urkullu por convocar elecciones el 12 de julio

1. Iñigo Urkullu se ve superado por las circunstancias coyunturales que le rodean y las consecuencias para el país y para todo el mundo que van a venir ocasionadas por la fatal situación a que ha llegado el capitalismo que provoca el inexcusable reseteo de las relaciones económicas mundiales, programado por esas élites mafiosas que pugnan entre ellas por establecer su hegemonía, llegando al acuerdo de repartirse entre ellos la tarta de los recursos y riquezas mundiales, a costa del criminal sacrificio que va a suponer el máximo empobrecimiento y esclavitud del 95% de la población mundial.

2. Iñigo Urkullu no quiere quedar para la historia como el malvado que va a obligar a la población gobernada por él, a unos recortes escandalosos, a un control dirigido que va a eliminar en gran medida la libertad personal de todos (incluidos los votantes de su candidatura).

3. Iñigo Urkullu es, típicamente, de «encefalograma plano», pero no es imbécil, ni tampoco, creo yo, un político de esos «insensibles» a los crímenes, a los robos a sus gobernados, a los magnicidios mafiosos, a las actuaciones contra una mínima moderada ética humana… Y sabe que todo eso le viene a sus espaldas… y, además, sin contar con el suficiente respaldo electoral.

4. Iñigo Urkullu está aturdido por el miedo, es consciente (según sus declaraciones) de que un posible rebrote de la pandemia puede hacer imposible la convocatoria de elecciones en el setiembre-octubre próximo. Sin embargo, ha visto la posibilidad de convocarlas en este, para él, «descanso» pandémico en julio que, a pesar de esa mentirosa y archisabida encuesta que están publicando, presenta una muy mala expectativa de voto para su partido jeltzale, que es, cada vez más claramente, la plasmación en la Comunidad Autónoma Vasca, del centro-derecha que pretenden con ese maridaje entre Aznar y Felipe-x González, representado por esa (soñada por ellos) gran coalición pro-España, firmada entre PP y PSOE, sublimación de ese bipartidismo alienante que sigue imperando en España y en casi todo el mundo.

No puede ni se plantea dejar la oportunidad de julio!

Y, en su reflexión profunda, es posible que lo vea como una posible «tirada de toalla» no ridícula en apariencia, que le pueda dar «una salida vital personal/familiar», que, por otra parte, tiene todo el derecho de desear y planificar… El problema de un plan como ese radicaría en traspasar a otras fuerzas políticas el «apechugar» y sufrir las consecuencias negativas derivadas de las actuaciones gestionadas por el partido de los jeltzales y sus amigos globalistas, claro.

¡Y… ya puestos en ello, tienen la experiencia de lo que les pudo representar el paréntesis de la época de Pachi López como lehendakari!

EH-Bildu debe tener muy presente todo eso como tema de reflexión y no caer en las trampas políticas que, tradicionalmente, suele saber preparar la derechona…

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