Sumar adhesiones al cambio de estatus

La iniciativa Demokrazia Bai! que se presentó en abril de este año acelera su andadura con un manifiesto para la recogida de firmas y un acto público. Con ambas ideas sus impulsores pretenden que la sociedad civil adquiera un mayor protagonismo en el impulso al cambio de estatus que se perfila en el horizonte político vasco. El respaldo social es uno de los elementos que refuerza los acuerdos políticos y resulta especialmente necesario cuando se trata de cambios de calado como la modificación de la naturaleza de las relaciones políticas con el Estado. Así lo atestiguan, por pasiva y por activa, experiencias tan conocidas como el Plan Ibarretxe y el «procés» catalán.

El manifiesto de Demokrazia Bai! recoge las ideas que justifican la urgencia de un cambio de estatus. Razones que son asumidas por una mayoría de la sociedad vasca, tal y como lo confirman las diferentes perspectivas políticas de los primeros firmantes. A estas alturas resulta evidente para cualquier observador que la involución en la que está sumido el Estado español amenaza con uniformizar e imponer un modelo único a todos los pueblos del Estado, así como recortar derechos y libertades. Hacer frente a esa regresión solo es posible desde el avance hacia un nuevo marco que reconozca la soberanía de las partes, tal y como proponen las bases acordadas por PNV y EH Bildu en el Parlamento de Gasteiz y las reivindicaciones formuladas por el Gobierno de Nafarroa.

Hace 40 años, cuando se aprobaron la Constitución y los estatutos, el mundo era muy distinto y Euskal Herria también. Todo se ha transformado: de la integración económica en la UE y el euro a la desaparición de ETA. Pero quizás lo más importante es que han cambiado los retos de futuro a los que la sociedad vasca debe hacer frente. Y nuevos desafíos exigen nuevas herramientas que no dependan de la voluntad de otros. La suma de adhesiones populares es el mejor camino a ese imprescindible nuevo estatus.

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