David Hockney ilumina la primavera de París
La Fundación Louis Vuitton homenajea al gran artista británico con una retrospectiva mayúscula. El título, con subtítulo incorporado, es completamente Hockney, como su obra y alguna de sus frases favoritas: «David Hockney, 25 - Recuerda que no pueden cancelar la primavera».

La obra de David Hockney (Bradford, 1937), considerado uno de los artistas más importantes e influyentes de este siglo y también del anterior, protagoniza una de las exposiciones más atractivas de la primavera-verano de 2025. El escenario es la Fundación Louis Vuitton, un edificio futurista diseñado por Frank Gehry y dedicado a acoger arte contemporáneo que se asienta en el Bois de Boulogne, el bosque de París. Precisamente Gehry, cuyo retrato cuelga en esta muestra, es también el arquitecto del Museo Guggenheim de Bilbo, donde el artista ha expuesto, al menos, en dos ocasiones.

Hockney va más allá cuando asegura que esta retrospectiva que mira al pasado, pero también al presente, es muy importante para él. «Tiene un significado enorme porque es la más grande que he presentado: 11 salas en la Fundación Louis Vuitton, con algunas de las últimas pinturas en las que estoy trabajando y creo que será muy buena», mencionó antes de la inauguración.


En esta iniciativa coinciden varios factores, la calidad, la cantidad y las grandes dimensiones, teniendo en cuenta que la muestra supera las 400 obras, todas ellas realizadas por el artista británico desde 1955 a 2025. Se incluyen pinturas de colecciones internacionales, privadas y también institucionales, además de las procedentes del propio estudio del artista y de su Fundación. Los soportes también son variados: hay pintura al óleo y acrílico, dibujo a tinta, lápiz y carboncillo, dibujos fotográficos, grabados e incluso arte digital con creaciones realizadas con el iPad y con el iPhone, instalaciones de vídeo inmersivas, escenografías...



Pese a su avanzada edad -87 años, Hockney cumplirá 88 el 9 de julio- y su delicado estado de salud, aunque siga fumando y discrepando de la “liga anti-tabaco”, desde la Fundación Louis Vuitton mantienen que el autor ha estado muy involucrado en el montaje: «Ha participado personalmente en cada aspecto de la exposición y, junto con su socio y director de estudio, Jean-Pierre Gonçalves de Lima, ha optado por centrarse especialmente en los últimos 25 años, incluyendo también sus icónicas primeras obras, ofreciendo a los visitantes una perspectiva única de su universo creativo, que abarca siete décadas. El artista ha participado en la composición de cada secuencia y la disposición de cada espacio, en constante diálogo con su asistente, Jonathan Wilkinson».





Mucho oficio para este artista nacido en Bradford en una familia de clase trabajadora de una ciudad industrial de Yorkshire -la cuarta más grande de Inglaterra, también cuna de las hermanas Brontë- donde Hockney ya pintaba de chaval y a los 17 años también se sentía profesional. Uno de los grandes pioneros del Pop Art, su contribución al arte es enorme y variada, como constata Wikipedia en las ocupaciones que le atribuye: pintor, grabador, fotógrafo, escenógrafo, dibujante, ilustrador, litógrafo, artista gráfico, escultor, collagista y dibujante arquitectónico. Con obra repartida en galerías y museos de distintas partes del mundo, a Hockney le han dedicado más de una veintena de libros.

En noviembre de 2018 su obra “Retrato de un artista” (Piscina con dos figuras) fue vendida por la casa de subastas Christie's en Nueva York a un precio récord de 90,3 millones de dólares (unos 79 millones de euros); esta venta le convirtió en el artista vivo más cotizado del mundo. El récord duró poco; en mayo de 2019 le sucedió Jeff Koons, el empresario, escultor y pintor estadounidense con su escultura “Rabbit” en acero inoxidable que fue vendida por un precio de 91 millones de dólares. No obstante, el año pasado, seis pinturas de Hockney figuraron entre las 100 obras más valiosas adquiridas en subasta.



EL CONTENIDO
La muestra se titula “David Hockney, 25”, en claro homenaje a uno de los nombres más cotizados, quizás haciendo un guiño a este año y a que se centra principalmente en el último cuarto de siglo de su carrera. La exposición también alberga pinturas de sus inicios -de 1950 a 1970-, entre ellas el retrato de su padre, fechada en 1955 y otras de su estancia en Londres y luego en la California de la década de los 60. Y a los paisajes de entonces hay que añadir otros más recientes, como esos que materializó con su iPad no hace tanto mientras vivía en Normandía -entre 2019 y 2023-. Hay también una sala repleta de retratos de familiares, amigos y amantes, unos 60, que comparten espacio con sus divertidos retratos de flores. Nada como fijarse en uno mismo. Hockney, sobre todo, se ha inmortalizado a sí mismo en sus geniales autorretratos que superan el centenar. En uno de los más recientes, como tantas veces, se pinta fumando. Un Hockney en silla de ruedas, con problemas de audición y atención constante, aún pinta a diario; luce en sus apariciones sus clásicos trajes de tweed de colores y sigue haciendo gala de su sentido del humor.

¿CUÁNDO Y DÓNDE?
La exposición, que abrió sus puertas el 9 de abril y se prolongará hasta el 31 de agosto, se puede visitar desde las 11:00 a las 20:00 horas todos los días de la semana, excepto los martes, en el edificio de la Fundación Louis Vuitton. La Noche de los Museos, que este 2025 se celebrará el 17 de mayo, la entrada será accesible de forma gratuita y sin reserva de 19:00 a 00:00.


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