KOLDO LANDALUZE
CINE

«The Limehouse Golem»

Entre la niebla de aquel Londres victoriano que siempre tendemos a asociar con la noche y lo prohibido acechan buena parte de nuestros terrores más queridos. Siempre vigilantes y dispuestas a perdurar en nuestro imaginario, las criaturas que dieron sentido a algunas de nuestras pesadillas infantiles aguardan su oportunidad para recuperar su protagonismo. Tal es el caso de Drácula, la criatura del doctor Frankenstein, o Dorian Grey, personajes literarios que en los últimos tiempos han encontrado, sobre todo en el medio catódico, una puerta abierta para colarse entre nosotros. Uno de los responsables principales de haber dejado entreabierta esa puerta ha sido el prestigioso y oscarizado cineasta Sam Mendes, quien quiso rendir un homenaje a esta galería de seres fantásticos a través de la serie “Penny Dreadful”.

Dejando a un lado este más que notable ejercicio creativo –que, por el momento, no regresará tras haber cumplido tres temporadas en antena– que rendía tributo a las novelas baratas de terror que causaban furor en aquella época, el cine ha vuelto a recrear en la gran pantalla este paisaje de ladrillo y luz de gas mediante una obra de similares características a la serie citada con anterioridad. Se trata de “The Limehouse Golem”.

Basada en la novela epistolar de 1994 “Dan Leno and the Limehouse Golem”, de Peter Ackoyd, es un thriller policíaco decimonónico que desarrolla su trama en la época victoriana, concretamente en 1880. Si bien este año fue acaparado en los titulares de prensa por “Jack el Destripador”, el argumento se centra en una criatura proveniente del imaginario fantástico, el Golem.

Alzado el telón de celuloide, topamos con el prólogo de un crimen intrigante, la muerte de un autor teatral fracasado y de buena cuna (Sam Reid). La principal sospechosa es su compañera sentimental (Olivia Cooke), la cual irá a parar a prisión acusada de haberlo envenenado. A partir de ese instante, el film realiza un breve viaje al pasado que nos sitúa ante una serie de crímenes acontecidos en los bajos fondos y que han sido atribuidos a una criatura proveniente de la mitología judía, el Golem. Cabe recordar que este ser ha inspirado un buen número de textos literarios y cuenta entre sus más famosas leyendas la que protagonizó en el siglo XVI un conocido rabino de Praga llamado Judah Loew ben Bezalel, al que se le atribuye la creación alquímica del Golem para defender el gueto de Praga de ataques antisemitas.

“Dan Leno and the Limehouse Golem” cuenta con un guion firmado por la prestigiosa Jane Goldman, autora de ”El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares”, de Tim Burton, y la sobresaliente “Kingsman: Servicio secreto”. En cuanto a la dirección, ha recaído en Juan Carlos Medina, un cineasta nacido en Miami y que tras el notable recibimiento que cosechó su ópera prima –“Insensibles” (2012)–, ha prolongado su carrera en Gran Bretaña con este nuevo proyecto que el propio realizador ha definido como algo que siempre quiso filmar.

«Yo soy un gran seguidor del escritor Peter Akoyd y cuando recibí este guion no pude dejar de leerlo hasta que lo acabé. Me gusta mucho su estilo, es muy similar al que Alan Moore planteó en su guion del cómic “Desde el infierno”. Además me permitía la posibilidad de recrear visualmente un Londres sumamente inquietante, casi apocalíptico», apuntó Medina. Precisamente la puesta en escena es una de las grandes bazas de las que goza este filme que contó entre sus protagonistas con Bill Nighy, sustituto en el último instante del fallecido Alan Rickman.