TERESA MOLERES
SORBURUA

Cascadas de flores

Personalizar una fachada sin interés con cestos y tiestos suspendidos de balcones y ventanas para crear una decoración aérea nos permite conseguir un jardín vivo siguiendo nuestra propia inspiración y unas reglas precisas.

Las plantas escogidas deben ser ejemplares muy jóvenes que enraízan muy pronto y se cubren de flores rápidamente, y además son más fáciles de colocar debido a su pequeño tamaño. Deben plantarse muy juntas. A las plantas maduras les cuesta varias semanas conseguir su pleno desarrollo.

Serán suficientes tres o cuatro especies cuidadosamente seleccionadas. Evitaremos las plantaciones rectilíneas o demasiado ordenadas, así que mejor con un poco de desorden en tonos y formas. La unión de plantas de follaje decorativo con especies floridas permite obtener matices sutiles. Da buen resultado jugar con contrastes de colores y géneros, añadiendo plantas aromáticas o condimentarias.

Si queremos bolas grandes que parezcan flotar en el aire, haremos composiciones monocromas con euforbias de flores blancas y vaporosas, de colores pastel con lobelias, surfinias, impacientes y guisantes de olor, y de tonos vibrantes con petunias de colores vivos, campanillas, verbenas, fucsias y geranios zonales, que iluminarán el jardín suspendido.

El secreto de esta plantación es una buena tierra para que produzca profusión de hojas y flores. Debe tener una estructura ligera que asegure la aireación de las raíces incluso si se nos va la mano con un riego copioso. No aplastar para que las raíces no se asfixien. La tierra apropiada para plantas colgantes lleva en su composición fertilizante de liberación programada.

Al comienzo de la plantación, regar regularmente y luego espaciar los riegos para que las plantas aprendan a vivir como un “camello” de sus reservas. Para evitar caídas al regar subidos a una silla, existen en el mercado lanzaderas con tubo y boquilla de riego en su extremo.

Es necesario favorecer el renuevo de las flores, para lo cual debemos suprimir las que tengan corolas marchitas y pinzar o cortar los extremos de los brotes. Esta operación de limpieza aumenta la ramificación y el renuevo de los botones florales.