Han sacado de nuevo a Cristóbal Montoro avisando de un incumplimiento del déficit por parte del reino de España que acarreará nuevas vueltas de tuerca en los próximos meses. La culpa no es del gobierno ahora en funciones, sino de los demás, de las autonomías, y la que más se ha endeudado, según insisten de manera recalcitrante en TVE, es Catalunya. La realidad y algún vestigio de verdad y TVE son incompatibles. Es una especie de barroquismo manipulador, de delirio marianista, de misión imposible de mantener con vida a un muerto democrático. Se estudiará este periodo de TVE en las escuelas de policía, para enseñarles a los nuevos noblecitos de interior cómo se manipula. En las facultades de audiovisuales lo tendrán más difícil, aunque pondrán como ejemplo los equipos de maquillaje.

Todos buscan un asidero, y la banda de Rajoy está con falsos dilemas internos. Quieren vender como jóvenes regeneracionistas a Casado y Maroto, pero no cuela. Por eso sacan a Montoro avisando de manera torticera que viene el lobo. Y como es un artista de la alucinación, hace ver que el déficit de 2015 es fruto de los nuevos gobiernos “de consenso” en las comunidades, una muestra más de su cinismo y la confirmación de que, si lo sacan, es para desanimar a los que hacen ver que están pactando lo que no quieren pactar, ni saben exactamente lo que están pactando.

Vienen malos tiempos económicos, más recortes, de repente va a llegar la realidad a visitarnos y a quitar todos los velos colocados en campaña electoral. Y si sale un gobierno escorado a la izquierda, habrá guerra sin cuartel, meses demoledores.

Europa, el PP y los medios orgánicos están entrenados con Grecia. ¿Tiene otro asidero Sánchez más allá de la verborrea reaccionaria de un nervioso Rivera?