El sindicato LAB y la Asociación de niños y niñas con Síndrome de Angelman (ASA) exigieron ayer la readmisión de Ainhoa Mendo, que ha sido despedida del Gran Hotel Durango tras solicitar una reducción de jornada para cuidar a hija enferma.

Asimismo, reclamaron al hotel que «acepte de inmediato la reducción, o cual sea la petición de Ainhoa, para la conciliación familiar y el necesario seguimiento y cuidado de su hija».

«La conciliación familiar es un derecho, y Gran Hotel Durango no puede valerse de la buena voluntad de una trabajadora, que acepta esperar unos días para realizar la solicitud, tal como le pidieron, para organizar su despido. Y no puede escudarse en una reestructuración cuando dicho puesto no desaparece», manifestó la central.

ASA recordó que la hija de Ainhoa tiene reconocida una discapacidad del 65% y una gran dependencia. «Con un horario a turnos, trabajando fines de semana, es impensable dar a la niña los cuidados que necesita; por lo que le era indispensable reducir su jornada laboral y dedicarle más tiempo a las necesidades de su hija», subrayó.