E l Ibex sigue atascado en los 8.800 puntos, incapaz de cerrar por encima. El protagonismo del día fue para los valores bancarios, que celebraron el sentido de las últimas actas del Banco Central Europeo. En el texto se desvela que no hay discusión sobre el mantenimiento del plan de estímulos, con lo que se despejaron las dudas esgrimidas últimamente en algunas informaciones. También dio ánimos la subida del precio del crudo, empujado estos días por el preacuerdo de la OPEP para limitar el bombeo. El barril de Brent superaba los 52 dólares, mientras que el West Texas se asentaba sobre los 50 dólares.

En Estados Unidos, los vientos siguen soplando a favor de la subida de tipos de interés. El miércoles apuntaban en esa dirección los datos de actividad en manufacturas y servicios, así como el incremento en los pedidos de bienes duraderos. Si hoy se publica un buen dato de creación de empleo, en el entorno de los 175.000 nuevos puestos, la suerte estaría echada, según los expertos.

Por otro lado, los inversores vieron un nubarrón en el sector de las aerolíneas, presionadas a la baja después de conocerse que Easyjet sufrirá este año una caída del 25% en el beneficio, perjudicado por la evolución de la libra tras el Brexit.

El descenso iniciado por el Ibex a hora y media del cierre se paró en los 8.757,40 puntos, tras bajar un 0,24%. En Europa, las caídas fueron parecidas: Fráncfort cedió un 0,16%; París, un 0,22%; y Londres, un 0,47%. En el Ibex, Caixabank (+2,46%), Santander (+1,02%) y Bankia (+0,94%) mostraban el buen día del sector. Por el contrario, IAG (-4,25%) y Aena (-2,57%) sufrían por los números de Easyjet.

En París, también brilló el sector financiero. Axa (+2,40%), Société Générale (+2,19%) y BNP Paribas (+2%) eran los mejores, mientras que Nokia (-3,46%) fue el peor de la jornada.