EDITORIALA
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Pequeña victoria que abre camino a la justicia

La Fiscalía de la Audiencia Nacional renunció a presentar recurso ante el Tribunal Supremo por la sentencia de la sala de Apelaciones de la AN del pasado 7 de marzo en relación con la trifulca nocturna entre varios jóvenes de Altsasu con dos guardias civiles y sus parejas. Aunque la sentencia ratificó las penas anteriores, volvió a descartar la acusación de «terrorismo», algo que ahora también asume la Fiscalía con su decisión de no recurrir la sentencia.

Dos años y medio ha necesitado el Ministerio Público para cambiar de criterio ante unos hechos que el sentido común y casos similares confirman que nada tienen que ver con la acusación de «terrorismo». Un tiempo demasiado largo que, además, los jóvenes acusados de Altsasu están cumpliendo en prisión. Diferentes factores habrán influido en este cambio de criterio de la Fiscalía, pero sin duda hay dos que sí han tenido un peso significativo. Por una parte, está la enorme movilización ciudadana, cuyo colofón se produjo el pasado domingo en Altsasu, pero que ha tenido otros hitos importantes a lo largo de todo este tiempo y en la que han participado personas de Nafarroa y del conjunto de Euskal Herria, pero también de Catalunya y de otros puntos del Estado. La solidaridad con los acusados y la demanda de justicia ha llegado mucho más lejos de lo que previeron los muñidores de esta operación de castigo. Elocuentes fueron los silencios de los tertulianos el lunes por la mañana. A nadie se le escapa, por otra parte, que el juicio al procés ha puesto en el punto de mira de la comunidad internacional a la Justicia española. Todo lo que ocurre a su alrededor es analizado con interés y detenimiento por diferentes actores internacionales, lo que obliga a los órganos judiciales españoles a dar una imagen de independencia y ecuanimidad que en el caso de la pelea de Altsasu es simplemente imposible.

La renuncia de la Fiscalía a presentar recurso es una pequeña victoria de la solidaridad y la movilización contra la injusticia. Una pequeña victoria que ha costado mucho esfuerzo, pero que va abriendo camino a la justicia.