Las primeras palabras de Iñigo Urkullu tras el primer Consejo de Gobierno de este curso, celebrado ayer en el Palacio Miramar de Donostia, fueron para recordar al recientemente fallecido profesional de TVE Javier Lanza y, posteriormente, citó también a las familias de Alberto Sololuze y Joaquín Beltrán, los dos trabajadores enterrados por el derrumbe de Zaldibar.

La catástrofe del vertedero también tuvo lugar en una intervención marcada por el covid-19. En concreto, a preguntas de los periodistas, Urkullu destacó que el Gobierno mantiene el compromiso de la búsqueda, pese a que cree que algunos pensaron que la iban a abandonar el 5 de abril primero y el 12 de julio después, en alusión a las fechas de las elecciones. Y dejó caer una vez más que están rastreando la zona «de modo subsidiario a la empresa».

«Ha pasado el 5 de abril, ha pasado el 12 de julio y seguimos como Gobierno Vasco cumpliendo con nuestra palabra, con carácter subsidiario a la responsabilidad de la empresa, con todo lo que ello supone también de coste económico para la búsqueda de las dos personas desaparecidas», apostilló.

También se le planteó si es verdad que una de las dos familias no quiere reunirse con él y así lo reconoció el lehendakari en funciones, aunque matizando que «lo que se me transmite es que no quieren reunirse con políticos, no con el lehendakari». Ante ello, señaló que en ningún momento ha buscado una reunión con imágenes.

El papel de Mendia

A poco más de una semana para el pleno de investidura, el lehendakari en funciones afirmó que el acuerdo con el PSE está muy cerca. Pero preguntado sobre uno de los aspectos más relevantes, si aceptará a Idoia Mendia como vicelehendakari, señaló que «no me voy a pronunciar sobre cábalas» y añadido que quien debiera responder a eso es el PNV y no él.

Urkullu, quien citó expresamente a todos los consejeros, incluido al dimitido cabeza del departamento de Sanidad, Jon Darpón, valoró la labor del actual Gobierno de coalición, que ha compartido un «mismo proyecto» y una «misma estrategia» con espíritu colaborativo.

Sobre las negociaciones, aseguró que «avanzan» en los «cuatro bloques de trabajo» establecidos desde el inicio de las conversaciones entre ambos partidos, que arrancaron el pasado 20 de julio.

El lehendakari no quiso confirmar si el autogobierno es uno de los flecos pendientes para culminar este pacto, que deberá ser refrendado por las bases de las dos formaciones.