Un grupo de científicos rusos ha hallado en el lago Chebarkul, ubicado en el suroeste del país, varios fragmentos del meteorito que el pasado viernes cayó sobre la región de los montes Urales.

Viktor Grohovsky, de la Universidad Federal de los Urales, ha confirmado a la agencia de noticias RIA Novosti que la expedición ha encontrado partículas «con naturaleza meteórica» en los alrededores del lago Chebarkul.

De acuerdo con la NASA, el meteorito, de unos 15 metros de diámetro, atravesó la atmosfera terrestre a una velocidad mayor a la del sonido y se desintegró en varios pedazos.

Los trozos del meteorito cayeron sobre tres regiones rusas y Kazajistán, causando un estallido similar al de un misil y un temblor equivalente al de un terremoto.

Los mayores daños se registraron en la ciudad de Chelyabinsk, donde, según el último balance del Ministerio de Sanidad, hay 1.200 heridos, 12 en estado grave.

En cuanto a los daños materiales, más de 900 edificios y 100.000 familias han resultado afectados por la caída del meteorito.