La presidenta del Gobierno navarro y líder de UPN, Yolanda Barcina, pugnará con el actual vicepresidente de la formación y presidente del Parlamento, Alberto Catalán, por el liderazgo del partido regionalista en el IX Congreso de UPN que se celebrará el domingo en Iruñea.

Preguntada por la acusación de haber «amenazado» con convocar elecciones al parlamento foral si pierde el Congreso de UPN, Barcina ha asegurado que «nada más lejos de haber hecho yo una amenaza de ningún tipo a nadie».

«Yo lo que he estado es explicando y diciendo la verdad: Este gobierno está débil por una serie de circunstancias y que el hecho de que haya otra candidatura lo debilita más. Esto es real, y aquí hay más cosas en juego, porque debilitar más a un gobierno que está débil no es positivo», ha dicho sin referirse explícitamente a la minoría parlamentaria de UPN y a la polémica de las últimas semanas por el cobro de altas dietas procedentes de Caja Navarra.

Preguntada por su futuro a partir del lunes en el caso de que catalán se hiciera con la presidencia de UPN, ha recordado los «problemas» que hubo cuando ella misma compartió «bicefalia», ya que durante dos años Miguel Sanz fue presidente del Gobierno de Nafarroa y ella presidenta de UPN.

«Ya se irá viendo, pero ha habido problemas. Me tocó compartir bicefalia con el anterior presidente y hubo momentos que creo que no son positivos, y más cuando hay debilidad en un Gobierno», ha recordado.

En cuanto al Congreso del partido, ha señalado que afronta la cita «con el mejor equipo con el que se puede ir, un equipo renovado, con unas personas cerca en mi candidatura que creo que son un ejemplo de políticos», ha dicho respecto al candidato a secretario general, Óscar Arizcuren, y al propuesto como vicepresidente, Antonio Sola.

«Son dos alcaldes ejemplo», ha calificado tras recordar que como primer edil de Fustiñana Sola «ha ganado elección tras elección» y el de Noain, Arizcuren, es «el único de la Comarca de Pamplona con mayoría absoluta».

«Son dos ejemplos porque son dos personas que viven de su trabajo y están dedicando su tiempo libre a la política, pero además con ideas, con ilusión, con ganas de renovar de verdad nuestro partido, que lo necesita», ha reconocido.

Así, Barcina considera que UPN «necesita un impulso desde abajo para atender mejor a todos los comités locales, afiliados en todos los ayuntamientos, para seguir estando preparados y ser el partido líder que necesita Navarra».