Errekondo ha destacado el porcentaje de participación, superior al de la consulta de 1994 y también a las elecciones más recientes. A juicio de la diputada foral, que más de siete de cada diez personas con derecho a voto haya participado legitima la consulta «a pesar de la confusión mediática, judicial y política», y supone «una práctica de democracia directa, real y cívica».
Según los datos definitivos, la participación ha sido del 72,1%, 637 votos de un censo de 883 personas. El 61,38% de los participantes (391) ha votado en favor de conformar un nuevo municipio, mientras que el 36,73% (234) ha optado por continuar formando parte de Donostia.
Arantza Ruiz de Larrinaga, directora de Participación Ciudadana, ha indicado que han sido casi 400 igeldotarras los que han tomado parte en todo el proceso de participación anterior a la consulta. Su departamento realizará ahora un informe sobre la consulta y su resultado, que se añadirá al dossier junto a los análisis sobre viabilidad económica y territorial. También aportarán sus informes el ayuntamiento de Donostia y la plataforma vecinal Itsas-aurre. Una vez que obre en sus manos toda la documentación, el Consejo de Gobierno de la Diputación tomará una decisión «en unos meses. Es un procedimiento abierto en el que no hay plazos fijos», ha sentenciado Errekondo.