El sindicato CAT ha acusado al Ministerio español de Industria, tras suspender la reunión prevista para el pasado viernes, de «no tener ningún interés» en resolver la situación del astillero. Asimismo califica de «mentira» el argumento del Gobierno de Iñigo Urkullu cuando afirma que desconocía que estuviese convocado a ese encuentro. «No quieren hacer nada, solo buscan justificaciones falsas y tratan de engañar a la población», sostiene el sindicato, que ostenta tres de los 9 delegados sindicales en el comité de empresa.

El sindicato CAT responsabiliza a ambos gobiernos, a PNV y PSOE y a quienes les apoyen de «querer cerrar el astillero y acabar con la Margen Izquierda y 4.000 puestos de trabajo en un segmento generador de empleo y riqueza social y que condena al empobrecimiento económico e industrial» a la comarca. «Si la situación y la movilización se radicaliza solo hay unos responsables, que son ambos gobiernos y sus partidos» advierte la central sindical, que pide asimismo a la ciudadanía «que no vote en las próximas elecciones a los partidos que destruyen empleo en vez de crearlo».

En ese punto, la central sindical recuerda que en el informe que encargó para analizar si el rescate público del astillero es posible sin que sea considerado por la UE ayudas de Estado, «se demuestra que es posible que ambos gobiernos inviertan y busquen un inversor de acompañamiento para La Naval y mienten y mienten cuando dicen que sería considerado como Ayuda de Estado».

Desde el punto de vista del sindicato CAT «está demostrado que la intervención se puede hacer como lo haría cualquier inversor privado en una economía de mercado, acompañado de un Plan de viabilidad, creíble y carga de trabajo para un plazo de tres a cuatro años».

En su comunicado, los representantes de la plantilla emplazan a ambos gobiernos a que hagan lo mismo que el Gobierno francés con la acería Ascoval, a la que ha aportado dinero público, «operación que ha sido consentida por el tribunal de gran instancia de Estrasburgo»; como también lo hizo la Comisaria de la Competencia con el astillero francés de STX de St. Nazaire o el Gobierno italiano en la fábrica Sarda de Portovesme, porque «eso sí es defender y apostar por la política industrial de un país».

En ese punto, el sindicato CAT denuncia que durante el periodo de consultas, «no se ha avanzado nada en la búsqueda de soluciones, inversores o propuestas que puedan servir para salvar el astillero» porque el administrador concursal «se ha dedicado a querer comprar nuestros despidos, ofreciendo indemnizaciones por encima de lo que marca la Ley y que seamos nosotros quienes cerremos el astillero».

Por otro lado, hoy a las 12.00 horas, los trabajadores van a celebrar una asamblea en las instalaciones del astillero donde está previsto que el comité plantee en la cita a los trabajadores nuevas movilizaciones de protesta que se desarrollarían en próximos días.