Trabajadores de La Naval se concentraron ayer al mediodía en Bilbo, donde en esta ocasión reclamaron «soluciones» al presidente del Gobierno español como «máximo responsable del cierre del astillero».

Inicialmente, esta movilización estaba convocada en la plaza Nueva, a donde acudió Pedro Sánchez para visitar la sede de Euskaltzaindia (información en la página 11). Pero la Ertzaintza no les permitió hacerlo en ese punto y los trabajadores la llevaron a cabo en el Arenal entre un amplio despliegue policial conformado por varias dotaciones que colocaron delante sus furgonetas.

En el transcurso de la protesta, en la que se corearon gritos contra el PSOE y se exigieron soluciones, el secretario del comité de empresa, Juanjo Llordén, indicó que pretendían que el presidente español «les vea» y trasladarle que tiene que defender los puestos de trabajo del astillero de Sestao. «El PSOE tiene ya poco de socialista y nada de obrero», manifestó.

Llordén, representante del sindicato CAT, añadió que ese partido es, en estos momentos, el «máximo responsable del cierre de La Naval» ya que, como recordó, la privatización fue una «decisión política» del astillero, que es lo que les ha llevado a la situación actual.

No obstante, insistió en que se puede hacer una oferta al administrador concursal para alquilar las instalaciones y se pueden comprar los activos de la draga del armador Van Oord.

Por su parte, la SEPI ha pedido a los sindicatos que los trabajadores incluidos en el acuerdo de recolocación elijan su preferencia de destino en Navantia.