Dabid Lazkanoiturburu

Sudán normaliza relaciones con Israel a cambio del fin del veto de EEUU en el BM

Sudán se ha sumado finalmente a los países árabes que han normalizado relaciones con Israel. Lo ha hecho después de que EEUU haya levantado el veto del Banco Mundial para conceder préstamos al empobrecido país africano.

El jefe de la diplomacia de EEUU, Pompeo, y el hombre fuerte de Sudán, el general Al-Burhan, en diciembre en Jartum. (AFP)
El jefe de la diplomacia de EEUU, Pompeo, y el hombre fuerte de Sudán, el general Al-Burhan, en diciembre en Jartum. (AFP)

El Gobierno de transición de Sudán ha firmado finalmente hoy miércoles los 'Acuerdos de Abraham', destinados a normalizar relaciones con Israel, convirtiéndose así en el tercer país en sumarse a la iniciativa impulsada por EEUU tras Emiratos Arabes Unidos (EAU) y Bahrein.

La ceremonia ha sido celebrada en el marco de una visita al país árabe de una delegación estadounidense encabezada por el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin.

Precisamente Mnuchin ha firmado poco antes un memorando de entendimiento con el Gobierno sudanés para facilitar la liquidación de las deudas pendientes del país africano con el Banco Mundial (BM) y para que pueda acceder a la financiación de este organismo después de 27 años de veto.

El memorando establece un préstamo puente inmediato, lo que permitirá a Sudán tener acceso a cerca de 1.200 millones de dólares en un préstamo del BM.

Compensaciones por atentados y «lista negra»

El acuerdo entre EEUU y Sudán para que este país normalizara relaciones con Israel fue anunciado el 23 de octubre, días después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, anunciara que el país africano sería sacado de la lista de países patrocinadores del «terrorismo» –en la que figuraba desde 1993– tras el pago de compensaciones por valor de más de 500 millones de dólares en compensaciones a familiares de víctimas de varios atentados.

El Gobierno de Jartum anunció meses antes, en febrero, un acuerdo con las familias de los marines muertos en un atentado perpetrado en 2000 por Al Qaeda contra el destructor 'USS Cole' frente a las costas de Yemen. El  acuerdo incluía compensaciones a las víctimas de los atentados perpetrados en 1998 contra las embajadas estadounidenses en Nairobi, Kenia, y Dar es Salaam, Tanzania.

El presidente del Consejo Soberano de Transición de Sudán, el general Abdelfatah al Burhan, afirmó el 27 de octubre que el acuerdo para normalizar relaciones con Israel era parte de las medidas necesarias para que Estados Unidos retirara a Jartum de la lista de patrocinadores del terrorismo.

EEUU retiró en diciembre de su «lista negra» a Sudán. No obstante, el anuncio despertó los recelos de los partidos políticos que participan en el Ejecutivo de transición y que fueron los que protagonizaron la revuelta que en 2019 forzó la destitución y encarcelamiento de Omar el-Bashir.

El longevo presidente sudanés coqueteó  en la década de los noventa coqueteó con grupos islamistas que acogieron en territorio sudanés a la red Al Qaeda de Osama Bin Laden, expulsado de Arabia Saudí tras su regreso del frente afgano que forzó, con la ayuda de Pakistán y la CIA, la retirada de la URSS.

De nada ha servido que el sector civil del Consejo de Transición insistiera en que una medida como normalizar relaciones con Israel solo la podría adoptar un parlamento elegido por sufragio –los comicios se prevén a finales de 2021. Los militares, aliados de El-Bashir hasta que decidieron desembarazarse de él, han primado las urgencias de un país que sufre una grave crisis económica.

De esta forma, Sudán se suma oficialmente a Emiratos Árabes Unidos y Bahrein, que rubricaron los acuerdos el pasado septiembre en una ceremonia en la Casa Blanca, en presencia del presidente estadounidense, Donald Trump, artífice de los pactos entre Israel y los países árabes.