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Anaitasuna prolonga su mala racha ante Ademar Leon (25-29)

Anaitasuna ha encadenado este sábado su cuarta derrota consecutiva ante un Ademar León (25-29) que se ha resarcido de su última derrota ante Sinfín. Así, los iruindarras ven empañado su buen inicio de la segunda vuelta y ocupan la décima posición de la tabla

Los jugadores de Anaitasuna escuchan a su técnico. (@AnaitasunaBM)
Los jugadores de Anaitasuna escuchan a su técnico. (@AnaitasunaBM)

Anaitasuna no ha podido superar a un Ademar León que se ha tomado la revancha de la primera vuelta y se ha rehecho de su última derrota en casa de Sinfín. Los iruindarras, que han ido siempre por detrás en el marcador, encadenan así su cuarta derrota consecutiva y ven empañado su buen inicio de la segunda vuelta en la que sumaron cuatro partidos sin perder (tres victorias y un empate) que le llevaron hasta el octavo puesto de la tabla.

Ahora, el equipo iruindarra ocupa la novena posición de la tabla, justo está en mitad de la clasificación, a tres puntos del octavo puesto, ocupado por Puente Genil. 

Los pupilos entrenados por Enrique Domínguez se han visto superados desde el pitido inicial y aunque el técnico ha querido tratar de cambiar el rumbo con un tiempo muerto en el minuto 12, cuando el marcador mostraba un contundente 6-10, no han podido frenar a un Ademar León que llegaba herido a La Catedral. 

Esa renta de cuatro goles se ha visto reducido antes del minuto 20 y tras un toma y daca interesante, los leoneses han ampliado la renta. Dos goles seguidos de Meoki e Izquierdo han devuelto la esperanza al conjunto local pero dos nuevas paradas Ghedbane junto a los aciertos de Marchán y Natán Suárez al borde del descanso han tirado por la borda el esfuerzo de los iruindarras (14-18). 

El inicio de la segunda mitad ha sido ilusionante para Anaitasuna pues han logrado acercarse a un gol pero nunca han podido empatar la contienda. El gol de González Arce que ha puesto el 17-19 en el marcador ha sido un aire de oxígeno para los visitantes –incluso para él mismo, pues ha marcado tres goles consecutivos– para dar un golpe en la mesa de La Catedral, dañando a un equipo local que apenas ha podido reducir la renta de tres goles en contra –en gran parte por las paradas de los guardametas rivales o la falta de acierto en los lanzamientos– para así encadenar su cuarta derrota consecutiva.