El Athletic ha comunicado que ha recuperado efectivos para afrontar la primera eliminatoria de Copa ante el Atlético Mancha Real. Marcelino, Unai Núñez, Raúl García, Zarraga y Lekue estarán con el equipo tras superar la baja por coronavirus. Rubén Uría, segundo entrenador de los rojiblancos, ha explicado en la rueda de prensa en Lezama que el técnico asturiano ha asistido al entrenamiento matinal de este miércoles y que decidirán el día del partido si sentará en el banquillo.

El resto de jugadores aquejados por el covid forman parte de la lista de 21 jugadores convocados. La principal novedad es el regreso de Dani Vivian después de dos meses de baja por una lesión muscular. Uría ha adelantado antes de ofrecer la lista que en los últimos días había trabajado con normalidad junto al resto del grupo. En cambio, ha comentado que con Yuri tendrán que tener más «paciencia». El lateral zurdo sigue recuperándose de la lesión de pubis que le obligó a pasar por el quirófano en verano.

Peru Nolaskoain, que jugó en El Sadar los últimos minutos después de un año y medio y podría salir cedido al Amorebieta en el mercado invernal, repite en la lista al igual que los «cachorros» Luis Bilbao y Artola. El extremo zurdo del Basconia y el máximo goleador del Bilbao Athletic en las últimas campañas también fueron citados contra Osasuna.

Nico Serrano y Julen Agirrezabala, que apunta a titular, han vuelto a ser llamados por el primer equipo. El de Orereta competirá con Ezkieta por el puesto ya que Unai Simón se queda en casa al igual que Yeray, De Marcos y Vencedor. Bruno Uría ha adelantado que van a realizar rotaciones ante la acumulación de partidos que tiene por delante el Athletic durante este mes de enero entre Copa, Liga y Supercopa.

En el capítulo de bajas se mantiene la de Villalibre. El de Gernika ha dado negativo en las pruebas, pero sigue estando lesionado. Asimismo, el club ha confirmado la lesión de Capa por una sobrecarga muscular. El lateral derecho no ha dispuesto de ningún minuto en lo que va de temporada. Termina contrato en verano y todo apunta a que no seguirá en el Athletic.

Bruno Uría, segundo de Marcelino, dirigiendo un entrenamiento en Lezama. (@AthleticClub)

Peligro en la estrategia y con la hierba artificial

El conjunto rojiblanco visita este jueves al Atlético Mancha Real en Jaén (20.00 horas, DAZN). Se trata de un equipo que compite en Segunda RFEF y proviene de una localidad con apenas 11.000 habitantes. Uno de los capitanes del rival es Urko Arroyo, un bilbaino formado en Lezama y que llegó a disputar varios encuentros con el primer equipo hace 15 años, uno con Clemente ante el Valencia en San Mamés en 2006 y dos años más tarde otro con Caparrós de entrenador en el Sánchez Pizjuán. Tiene 34 años y experiencia en numerosos equipos, incluso de Gibraltar, tras dejar el club rojiblanco.

En la plantilla contaban también con Txaber Ajuriagoikoa, medio centro de Zornotza nacido en 1999. No estaba jugando mucho esta temporada y acaba de anunciarse su marcha del equipo. El centrocampista que suele actuar de forma habitual es Óscar Quesada, que con 43 años y experiencia en Segunda con el Jaén, compagina su trabajo en una fábrica con el fútbol como ha relatado en varias entrevistas previas al encuentro.

El Atlético Mancha Real se encuentra en la parte baja de la clasificación, pero jugarán con toda la ilusión del mundo para doblegar a los leones. El entrenador Pedro Bolaños recordaba en la previa que en la anterior eliminatoria dejaron fuera a un equipo de Primera como el Granada con un gol en el inicio del partido (1-0) y que también se impusieron en la primera ronda al DUX Internacional de Madrid que compite en Primera RFEF contra el Bilbao Athletic.

Uno de los problemas que tendrá que acertar a resolver el equipo de Marcelino será el de la adaptación al terreno de juego. Es de hierba artificial y muy estrecho por lo que se pueden generar situaciones de peligro con facilidad en saques de banda y cualquier falta. Bruno Uría ha confirmado en la previa que han trabajado esos aspectos en el último entrenamiento para que los jugadores se acoplen lo antes posible a las dimensiones del campo. El segundo entrenador ha señalado que por «lógica» el Athletic debería de superar la eliminatoria por la diferencia de categoría, pero está convencido de que «no será nada fácil». Ha recalcado que encaran el encuentro con muchísima ilusión porque quieren volver a jugar una final de Copa esta temporada y desde el «máximo respeto» a su rival.

Los rojiblancos estarán arropados en las gradas por las numerosas peñas que tiene el Athletic en el sur de la Península. Se esperan unos 4.000 aficionados en las gradas del estadio de La Juventud.