
El diputado de la France Insoumise (FI) Adrien Quatennens ha sido condenado por un juez de Lille a cuatro meses de prisión, exentos de cumplimiento, por agredir a su exmujer.
La sentencia se conoce después de que el electo se acogiera al procedimiento de aceptación de culpabilidad, que permite acortar el procedimiento judicial.
Quatennens asumió «haber abofeteado» a su exesposa, en el contexto del proceso de separación.
Sin embargo, en un comunicado posterior, Céline Quatennens, la víctima de violencia sexista aseguró que el clima de presión y amenaza se extendió en el tiempo.
En su sentencia de hoy, que condena al diputado por «violencia contra la pareja que no acarreó baja incapacitante», el juez asegura que esos hechos se produjeron entre octubre y diciembre de 2021 en un contexto de «agresividad mutua» ligado a la separación entre ambos y también achaca al condenado el envío de mensajes, ya materializada la separación, aunque estima que los mismos «no reflejan intención malévola».
Quatennens deberá abonar 2.000 euros en concepto de prejuicio moral a su expareja, que ha estado presente en la vista en que se acordado la condena a Quatennens.
Tensión entre los socios de la Nupes
El «caso Quatennens» ha tensionado a su formación política y también al grupo parlamentario de la Nupes, algunos de cuyos principales se quejaron de la tardanza a la hora de adoptar la decisión de apartar de sus responsabilidades al diputado de la LFI.
Dentro de LFI se han alzado también voces que han criticado las primeras declaraciones, comprensivas y empáticas, de Jean-Luc Mélenchon hacia el considerado su delfín, por entender que el líder de izquierda no mostró igual cercanía hacia la víctima de la violencia sexista, a quien sí dirigió un mensaje más solidario con posterioridad.

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