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«Nuestros padres merecían reconocimiento», denuncian los familiares de las víctimas de Pasaia

Tres días después de que saliera a la luz el informe que reconoce como «ejecución extrajudicial» la muerte de cuatro militantes de los Comandos Autónomos Anticapitalistas en una emboscada policial en Pasaia, sus familiares han exigido «el reconocimiento que se merecen nuestros padres y madres».

Azoka Plaza de Azpeitia ha acogido esta tarde un acto con motivo del 39 aniversario de la matanza de la bahía de Pasaia, en la que cuatro militantes de los Comandos Autónomos Anticapitalistas –José Mari Izura, Pedro Mari Isart, Rafael Delas y Dionisio Aizpuru– fallecieron acribillados a balazos en una emboscada de la Policía española el 22 de marzo de 1984.

El aniversario coincide con la publicación del informe elaborado por la Cátedra Unesco de Derechos Humanos de la UPV-EHU, por encargo del Gobierno de Lakua, y en el mismo se acredita que los cuatro activistas fueron víctimas de una «ejecución extrajudicial» por parte de la Policía. Un informe con fecha de marzo de 2020 pero que hasta ahora no había sido entregado a las familias, lo que ha provocado enfado y estupor entre los allegados.

El acto ha comenzado con una actuación de txalaparta y en el mismo han tomado la palabra Arantxa Isart, hermana de Pedro Mari Isart ‘Pelitxo’; el historiador Iñaki Egaña y Pello Aizpuru, hermano de Dionisio Aizpuru ‘Kurro’. La presentación ha corrido a cargo de Laxaro Azkue y también ha actuado el dúo Eire de Zumaia.

Aizpuru ha explicado que están «dolidos» con el Gobierno de Lakua por ocultarles este informe durante tres años. «¿Quién decidió meter este documento en el cajón en el Gobierno Vasco¸ ¿Estos son los defensores de los derechos humanos? ¿Los que tratan a todas las víctimas por igual? Eso es mentira», ha subrayado.

Todos los progenitores muertos menos la madre de Aizpuru

Aizpuru ha recordado que llevan casi 40 años luchando por que se sepa la verdad y por un reconocimiento institucional: «Estamos cansados, tenemos un gran desgaste, pero seguiremos firmes, con dignidad», ha asegurado, para lamentar acto seguido que durante estos 40 años «se nos han muerto Justo y Miren, padre y madre de ‘Pelitxo’; Divina y Rafael, madre y padre de ‘Txapas’; María Angeles y Julián, madre y padre de ‘Pelu’; y nuestro padre, Tomás. La única que queda viva es nuestra madre, con 88 años. Vive con esa pena, la de no haber recibido ese reconocimiento».

Por ello, se ha dirigido al Gobierno de Lakua para reprocharle que «nuestros padres y madres merecían» ese reconocimiento, «lo necesitaban y se lo han negado. Nuestra madre tiene ese derecho, y se lo tienen que conceder antes de que muera», ha exigido.

Pelitxo: «El cóctel completo de violencia estatal»

Antes que Aizpuru, Arantxa Isart ha hecho un repaso de la vida de hermano ‘Pelitxo’, desde su primera detención con 18 y las torturas que sufrió a manos de la Guardia Civil, su encarcelamiento, el exilio en Iparralde en 1981, con el sufrimiento que conllevó tanto para él como para su familia, y, finalmente, su muerte en la emboscada de Pasaia.

«Tenía 24 años, sufrió todas las formas de violencia estatal, le hicieron probar el cóctel completo: Tortura, cárcel, exilio y finalmente fue asesinado. Desde entonces, la familia y sus amigos llevamos 39 años en busca de verdad y justicia», ha manifestado.

Rueda de reconocimiento y concentración: «Que los balazos no queden impunes»

El próximo martes, 28 de marzo, tendrá lugar en la Audiencia de Gipuzkoa una rueda de identificación de los policías que presuntamente participaron en la emboscada. El juez ha llamado a Joseba Merino, único superviviente de la masacre. La citación responde a un recurso presentado por los familiares y llega siete años después de que el Juzgado de Instrucción número 2 de Donostia archivase la investigación.

Con ese motivo, la iniciativa Pasaia Argitu ha convocado una concentración a las 10.00 ante los juzgados de Donostia, bajo el lema «Pasaiako sarraskia ikertu eta argitu».

Pello Aizpuru ha hecho un llamamiento a acudir a la movilización, porque «tenemos que demostrarles que no estamos dispuestos a que los 113 balazos que metieron a nuestros familiares queden impunes».