Los trabajadores de BSH de la planta de Ezkirotz están convocados este lunes a una huelga, la víspera del inicio del proceso de despido tras la decisión adoptada por la multinacional de no retrarsar esta medida para que cuajasen los intentos de reindustrialización impulsados por el Gobierno navarro y el comité de empresa. Hace una semana que la dirección de BSH comunicó mediante videoconferencia el cierre de la factoría.

La semana pasada el comité de empresa y consejeros del Gobierno navarro se desplazaron a Bruselas para reunirse con autoridades europeas en busca de una flexibilización de los plazos –«habíamos pedido que esperasen de quince en quince días», reveló la lehendakari María Chivite–, pero no fue posible.

Han instalado barricadas de fuego en la entrada principal de la factoría de Ezkirotz, impidiendo el acceso a la misma.

El presidente del comité de empresa, Juanjo Hermoso de Mendoza (LAB), ha denunciado que la dirección todavía no ha comunicado cuándo ni dónde será la reunión para comenzar a aplicar el ERE, prevista para mañana, lo que considera un ataque al derecho a la movilización de la plantilla.