
Que en Nafarroa las pensiones mínimas alcancen los 1.100 euros, haciendo realidad una de las grandes reivindicaciones de las asociaciones de pensionistas, es una de las prioridades que ha logrado EH Bildu a través del séptimo acuerdo presupuestario alcanzado con el Gobierno de Nafarroa para las cuentas de 2026.
La firma de este acuerdo ha tenido lugar en el Palacio de Nafarroa y en la misma han estado presentes el consejero de Economía y Hacienda, José Luis Arasti, y los tres vicepresidentes del Ejecutivo, Félix Taberna, Ana Ollo y Begoña Alfaro. Por parte de EH Bildu, han rubricado el pacto los parlamentarios Laura Aznal, Adolfo Araiz y Mikel Zabaleta.
A continuación, las dos delegaciones han comparecido ante los medios, con Arasti señalando, en nombre del Gobierno de Nafarroa, que esa firma es el resultado de «un largo trabajo de negociaciones» y que lo suscrito es «una expresión de las prioridades compartidas, ya que da pie a la aplicación de unos presupuestos que contemplan las necesidades de la ciudadanía navarra».
Ha insistido en que el acuerdo alcanzado es consecuencia de «un trabajo silencioso y responsable que nos permite seguir avanzando», frente a «un ruido» que asegura que no se avanza y que ha calificado de «mentira», además de ser «un golpe para el prestigio de la Comunidad foral».
El consejero de Economía y Hacienda ha detallado que el acuerdo supone que se apoyarán las enmiendas que presenten los cuatro grupos (PSN, Geroa Bai, Contigo-Zurekin y EH Bildu) y el rechazo a las que formulen otros grupos, salvo que se alcance un acuerdo por unanimidad de apoyo a la correspondiente iniciativa.
Y una vez que se haya consensuado el texto definitivo del proyecto de presupuestos, estos saldrán adelante con la abstención de EH Bildu, como ha recalcado la portavoz del grupo parlamentario de la formación soberanista, Laura Aznal.
Aznal ha celebrado que se haya firmado el séptimo acuerdo presupuestario y que, durante más de diez años, la derecha no haya podido intervenir en las cuentas del herrialde.
Ha puesto el acento en que ese respaldo se traduce en una abstención, ya que «estos no son los presupuestos de EH Bildu», pero ha destacado que ha conseguido introducir aportaciones «en ámbitos estratégicos para mejorar las condiciones de vida de la sociedad navarra», ya que son unas cuentas «de carácter social».
Además, ha querido poner en valor que, con este acuerdo, «hemos dotado de estabilidad a este Gobierno, porque actuamos con responsabilidad priorizando a la gente».
Prioridades conseguidas
Y para dejar patente a qué se refería, ha destacado que con sus aportaciones, EH Bildu ha conseguido «fortalecer los servicios públicos» con el objetivo de que asistan también a «los colectivos más vulnerables».
En este sentido, ha destacado que «hemos conseguido unas pensiones mínimas de 1.100 euros» para Nafarroa, lo que supone alcanzar e incluso superar los 1.080 euros que vienen reclamando desde hace años las asociaciones de pensionistas.
Siguiendo en el detalle de lo conseguido en la negociación, Aznal ha destacado el ámbito de la euskaldunización en dos aspectos. Por un lado, dando «el salto con la gratuidad de los niveles A2 y B1 en la euskaldunización de adultos» y, además, incrementando la partida presupuestaria para la implantación del modelo D en Faltzes con 550.000 euros.
Asimismo, para reducir los plazos para la valoración de dependencia y discapacidad, se reforzará este ámbito con un nuevo equipo de valoración y «Salud desarrollará un plan de infraestructuras».
E incluso se ha buscado una profundización en «la soberanía» mediante el acuerdo con el Ejecutivo para iniciar los trámites para el traspaso de la competencia de Inspección de Trabajo y Seguridad Social.
En total, las medidas propugnadas por EH Bildu entrañan un montante de 15 millones de euros, que se verá incrementado en el periodo de enmiendas a las cuentas, que supondrían otros cuatro millones.
Para el PSN el acuerdo muestra «una gestión dialogada»
Ante el acuerdo, la portavoz del PSN, Ainhoa Unzu, ha señalado en un comunicado que «permite seguir avanzando en las cuestiones que realmente importan a la ciudadanía», entre las que cita «la convivencia, el fortalecimiento de los servicios públicos, la vivienda, el desarrollo industrial y la innovación».
En su opinión, son unos presupuestos «responsables, ambiciosos y profundamente sociales» que reflejan «una gestión solvente y dialogada, que piensa en el futuro de Navarra y en las necesidades reales de la gente».

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