Mientras en Madrid, en el Consejo de Ministros se aprobaba un decreto que liberaliza el uso de las mascarillas al aire libre, en el Parlamento de Gasteiz se ha aprobado una Ley Antipandemia que obliga a su uso en todos los espacios. La norma española prevalece sobre la ley autonómica, así que el lehendakari, Iñigo Urkullu, anunció el pasado viernes que tendrá que firmar otro decreto anulando al menos ese artículo 20.3 de la ley.

Pero además, la norma hoy aprobada se sustenta en que esté en vigor la declaración de emergencia sanitaria y el lehendakari avanzó también la pasada semana que dicha declaración podría ser revocada en las próximas semanas, viendo la buena evolución de las cifras. Además, el proyecto se ve también afectado por la revocación del Estado de Alarma.

La ley se ha tramitado por la vía de urgencia. Desde octubre se sabía que el Estado de Alarma finalizaba el 9 de mayo. Tras algunos reveses sufridos por parte del TSJPV, el Gobierno de Urkullu anunció que prepararía un proyecto de ley para supuestamente dotarse de mayor seguridad jurídica para sus medidas. Sin embargo, finalmente PNV y PSE optaron por presentar ese texto como proposición propia, que tiene menos requerimientos garantistas y plazos más breves. Pese a todo, no lo registraron hasta el 26 de marzo, y aún con las prisas que se han dado, reduciendo a la mínima expresión –apenas dos horas– el debate de las enmiendas en ponencia, no se ha podido aprobar hasta este 24 de junio.

Para esta pandemia, no para otra

Ante la evidencia expuesta por la oposición de que la «ley nace muerta», los portavoces de PNV y PSE han destacado que desde que la presentaron expusieron que les gustaría que durara lo menos posible, porque eso supondría que la pandemia del covid-19 se estaba superando.

Además, el jeltzale Luis Javier Telleria y Ekain Rico, del PSE, han defendido que su propuesta es exclusivamente para esta pandemia de covid-19 y no para otras. Por ello han criticado la propuesta hecha por EH Bildu, que superaba este marco y que, a su entender, las medidas que propone ya se podrán debatir cuando llegue a la Cámara la Ley de Salud pública que el Gobierno tiene recogida en su calendario legislativo.

La Ley Antipandemia enumera diferentes estadios para fijar la gravedad de la pandemia, expone las medidas que se pueden adoptar en cada fase y un régimen sancionador para hacer cumplir esas normas.

EH Bildu, planteamiento general

En el debate, la representante de EH Bildu Rebeka Ubera ha defendido que una ley de este tipo es necesaria, porque a pesar de la situación actual los expertos pronostican que los efectos de la pandemia durarán todavía unos años. Y por ello ha subrayado que las medidas a adoptar no pueden ser las de la primera ola, porque las circunstancias van a ser otras. Además, ha apuntado que se ha hecho una ley pensada en salvar las decisiones del TSJPV y no en la salud.

Ubera ha subrayado que su propuesta pretendía reforzar la columna vertebral de la salud pública para intentar adelantarse a las nuevas situaciones. Y que contempla también medidas para poder resarcir y ayudar a los sectores que se pueden ver afectados por las medidas que se adopten.

El propio informe de los servicios jurídicos del Parlamento recoge que «el espíritu de las enmiendas, comenzando por la propuesta de modificación del título de la iniciativa, es darle una carácter más general (referido no solo a la covid-19 sino a las enfermedades infecciosas) y por ende más estable y amplio (referido a cuestiones organizativas)», según ha leído la parlamentaria de EH Bildu.

Sin embargo, el parlamentario Luis Javier Telleria ha tratado de ridiculizarla, incidiendo con sorna que si se aprobara todo lo decidirían los técnicos «independientes», subrayando el término «independiente» para ridiculizarlo. Ha asegurado que «pese a darle muchas vueltas» no han encontrado que ninguna de las 72 enmiendas pudiera ser aprobada. Ha llegado a afirmar que son «ocurrencias». Lo ha hecho en su segundo turno de palabra, que ha empezado diciendo que no tenía mucho más que decir, pero sin embargo llevaba un discurso escrito para atacar una y otra vez a Rebeka Ubera.

El debate sobre los consensos

PNV y PSE han subrayado su satisfacción con el acuerdo alcanzado con Elkarrekin Podemos-IU, a quien han agradecido su disposición al diálogo, ya que desde un principio se acercó a los partidos del Gobierno para debatir sobre la cuestión.

La portavoz morada, Miren Gorrotxategi, ha explicado que «nosotras siempre decimos que el no por el no de poco sirve, sabemos perfectamente cuándo hay que decir sí y cuándo hay que decir que no. No tenemos vértigo y no nos casamos con nadie». Ha insistido en que «nosotras hemos llegado a este Parlamento para ser útiles, para hacer política constructiva siempre estaremos predispuestas al diálogo y al acuerdo. Somos una izquierda transformadora».

Por otra parte, la parlamentaria de EH Bildu Rebeka Ubera ha criticado que los partidos del Gobierno no han querido negociar con su grupo. Ha desvelado que se pusieron en contacto con la Consejera de Gobernanza Pública y Autogobierno, Olatz Aramendi, que fue la que inicialmente llevó el proyecto, que en esta fase les remitió a que hablaran con los partidos que no han querido escucharles.

Desde el PP, Laura Garrido ha dejado claro que los grupos del Gobierno solo han querido alcanzar un acuerdo con Elkarrekin Podemos-IU. Ha agradecido que a su grupo se le aceptaran 15 de 88 enmiendas, pero ha criticado que fueran meramente formales.

Finalmente, la Ley Antipandemia se ha aprobado con los 47 votos a favor de PNV, PSE y Elkarrekin Podemos-IU. En contra se han posicionado los 28 de EH Bildu, PP-Cs y Vox. Se ha dado la circunstancia de que EH Bildu ha votado a favor de enmiendas que mantenía EP-IU, contra las que se han posicionado los socios del Gobierno.

Ahora queda a la espera de las decisiones que en los próximos días y horas pueda tomar el lehendakari Iñigo Urkullu para ir desmontándola.