La diputada foral de Infraestructuras Viarias de Gipuzkoa, Aintzane Oiarbide, ha presentado este lunes el nuevo anteproyecto de norma foral para la implantación de peajes para los vehículos pesados en las carreteras A-15 y N-I. Es el tercer intento de regular esta cuestión, después de que las anteriores normas fueran tumbadas por los tribunales, al considerar que existía discriminación hacia el transporte de tránsito.

Hasta la fecha había tres puntos de cobro en Etzegarate, Andoain y Astigarraga, pero ahora el Gobierno foral que conforman PNV y PSE ha decidido ampliarlo hasta los 76,352 kilómetros que conforman la totalidad del recorrido de la N-I y la A-15 en territorio guipuzcoano. Todo será de pago.    

«No hay ninguna posibilidad de interpretación de discriminación directa ni indirecta, ya que absolutamente todos los enlaces y todos los movimientos existentes estarán sujetos a canon», ha certificado Oiarbide.

El proyecto ya ha comenzado su tramitación en las Juntas Generales, donde se debatirá y aprobará –ambos grupos suman mayoría absoluta– antes de que finalice el año. La posterior implantación del sistema, contempla la instalación de 4 pórticos troncales adicionales y 109 banderolas o semi-pórticos, llevará unos doce meses, y supondrá una inversión de 25,3 millones de euros.

«Tras cumplir con los gastos de conservación ordinaria, extraordinaria, gastos de operación y mantenimiento, los ingresos recaudados se destinarán a mejoras que reviertan en los usuarios de la N-I y A-15 y a actuaciones que supongan una menor afección a los residentes a ambos márgenes de las vías de alta capacidad», ha indicado Oiarbide.

Proyectos a financiar

Y ha citado como ejemplo «las obras de los túneles de la A-15 que estén pendientes de su ejecución a partir de 2023, las mejoras de trazado de la N-I como la de Bazkardo en Andoain, o diferentes actuaciones de mitigación del ruido».

El peaje afectará a los vehículos pesados de más de 3,5 toneladas destinados al transporte de mercancías. Las cuantías serán de 0,22 euros por kilómetro para los pesados 1 –entre 3,5 y 12 toneladas– y de 0,28 euros por kilómetro para los pesados 2, con peso igual o superior a 12 toneladas.

Oiarbide ha defendido este canon argumentando que «de este modo todos los vehículos pesados que atraviesen el territorio deberán pagar el mantenimiento de las vías de alta capacidad, y la misma no correrá a cargo solo de los impuestos de todas las personas guipuzcoanas».

PP: «Una norma desorbitada»

El portavoz del PP en las Juntas Generales, Juan Carlos Cano, ha opinado que la nueva norma foral «es desorbitada, no porque no responda a criterios jurídicos», sino porque «los cánones que contempla para los transportistas están fuera de toda realidad económica».

Cano ha criticado «el carácter penalizador, discriminatorio con los transportistas», un sector «de por sí muy castigado, siendo como es un eslabón de la cadena productiva y que podría repercutir el incremento de costes en el consumidor, algo que deberíamos tener en cuenta».

Además, ha tachado de «desproporcionadas y abusivas» las formas empleadas por la diputada de Infraestructuras Viarias. «Algo así como ‘nos habéis derrotado en el juzgado, pero los transportistas ahora os vais a enterar’, y nos referimos a que, en la nueva norma, duplica o casi triplica el importe de los peajes con respecto a la anterior, con unos cánones que incluso superan a los de las autopistas del resto de España, cuando, además, las carreteras de las que hablamos no lo son», ha resaltado.