Así lo ha anunciado en rueda de prensa el consejero portavoz Juan Luis Sánchez de Muniáin, quien ha destacado que esta reforma fiscal es necesaria para la economía navarra «para avanzar en la recuperación», así como para los ciudadanos con el objetivo de «aliviar la carga impositiva».

Ha manifestado que esta reforma «es una de las mejores herramientas que un Gobierno cuenta para poder incidir sobre la mejora de la economía y sobre la creación de empleo y de riqueza».

Las simulaciones realizadas arrojan una menor recaudación de cerca de 71 millones de euros, que se prevé compensar con una mayor actividad económica.

Sánchez de Muniáin ha dicho al respecto que el Gobierno pretende con la rebaja impositiva aumentar «la generación de economía» y en ese caso ha comentado que «se compensa e incluso se puede mejorar en tiempos de un posible crecimiento la rebaja de recaudación».

Esta reforma fue presentada en el Parlamento de Nafarroa como un documento abierto para recabar aportaciones, sin que se hayan producido éstas. Transcurridos dos meses, ha acordado concretar dicho documento en cuatro proyectos de ley foral correspondientes a los distintos impuestos afectados.

Los cuatro proyectos serán ahora remitidos de nuevo al Parlamento para su debate y votación durante el segundo semestre de este año, de manera que la reforma, de ser aprobada, pudiera entrar en vigor en 2015.