Cinco días después de que la Asamblea de Kutxa certificase su conversión en fundación bancaria –BBK y Vital lo hicieron a finales de junio– el Banco de España ha puesto sobre la mesa la obligatoriedad de privatizar al menos el 50% del capital o, en caso contrario, de aumentar el fondo de reserva inicial, lo que repercutiría negativamente en los recursos destinados a la obra social.
En este contexto, EH Bildu ha considerado que el PNV «está a tiempo de poner el freno en este camino que nos lleva al desastre» y le ha pedido que tome en consideración la propuesta realizada por la Diputación de Gipuzkoa de repartir a las instituciones públicas fundadoras de las cajas las acciones de BBK, Kutxa y Vital y «no venderlas a inversores privados».
En una rueda de prensa celebrada en Donostia, las representantes de la coalición soberanista Ainhoa Beola y Jone Etxeberria han considerado que la noticia de que el Banco de España obliga a Kutxabank a vender el 50% de sus acciones es «una nueva farsa en el camino para la privatización de las cajas vascas».
Beola ha recordado que, desde la creación de Kutxabank en 2011, PNV y PP «han ido siempre de la mano», al tiempo que ha subrayadoque la formación jeltzale fue «el único partido del Senado que negoció y aprobó con el PP la Ley de Cajas y Fundaciones Bancarias, y en ella se escudan constantemente para justificar todos los pasos que vienen dando».
La consejera de EH Bildu ha acusado a Mario Fernández de «faltar a la verdad» cuando asegura que la legislación española y el Banco de España obligan a la venta de acciones porque, según ha destacado, «obligan a las cajas a reducir su participación en Kutxabank, no a la venta de acciones». Por lo tanto, ha remarcado que BBK, Kutxa y Vital «tienen la opción de devolver sus acciones a las instituciones públicas vascas, que son las fundadoras de las cajas».